En el atronador trinar del día a día, hemos perdido la pausa de la lectura reflexiva y sosegada; Diego Gómez, director de ECSIM, viene tocando temas de interés, proponiendo reconstruir el país política, económica y socialmente para el momento que vive la nación, nuestra geopolítica nos tiene desconcertados. Diego trata, desde la cohesión social, la renuncia a gobernar del presidente Petro (ABC España) y un nuevo mundo ambiental, ha tocado temas y sospecho que va a seguir tratando otros tópicos, sobre lo que debe ser el nuevo contrato social; deseo que quienes aspiren a gobernar lean y analicen sus reflexiones; así como a otros columnistas serios. Pero, las propuestas de reformas sociales retrógradas, que nos remontan a años antes del gobierno de López Pumarejo, a las que nos quiere llevar el Pacto Histórico, no son viables ni justas con el pueblo colombiano.
En ese terreno, Gustavo Petro ha aprovechado para distraernos de nuestro verdadero calvario. Este gobierno se ha dedicado sin un ápice de seriedad y vergüenza a destruir el estado social de derecho; “Desarmando” Benedetti llegó para destruir a los verdaderos ideólogos e ilusos que creyeron que gobernar y administrar el país era soplar y hacer botellas… como dice Paul Lynch en el Cantar del profeta: “Ahora me doy cuenta de que lo que yo tomaba por libertad no era en realidad más que una lucha y no había libertad en ningún momento”.
Pues este señor Benedetti, que solo arma escándalos y a su vez tiene cogido al presidente sabe Dios por dónde, destruye a los líderes de la izquierda pensante y a las mujeres de nuestro país. Mientras, personas como Diego Gómez y otros que amamos a Colombia queremos justicia social verdadera sin destruir nuestras riquezas, no queremos inmolar a los colombianos.
Solo hay que ver la inseguridad y pérdida de la autonomía regional, el deterioro en el acceso de la atención en salud y educación, con una alta deserción escolar se ha vuelto paisaje, por temor a los discursos intergalácticos y disociativos del presidente. ¿La Constitución?, bien, gracias. El irrespeto a las sentencias de las cortes y el odio a la empresa privada, generadora de empleo y riquezas para mejorar el ingreso medio de los colombianos, bien, gracias, también.
Un gabinete en interinidad; el mininterior dijo desfachatadamente que lo tomaron como el “bobo” del paseo, como si no fuera al revés, incentivando el esquirolismo de algunos congresistas irresponsables que, untados con mermelada, desarman la institucionalidad. Horror, secuestran hombres de nuestras Fuerzas Armadas. La cifra de homicidios y los delitos comunes son deshonrosas, el secuestro (primer secuestrado es Petro por Benedetti), la extorsión y la parálisis estatal nos tienen agobiados. Los recursos del gas, petróleo y otras fuentes de energía están graves con un posible apagón y una inflación que no cede, por el contrario, tiene tendencia a subir. Meta 2026. PD: La reforma propuesta al sistema de la salud es un delito de lesa humanidad: ojo, congresistas.
Orlando Bustillo Pareja