Lamentaciones 3:23
En ocasiones desgastamos nuestra vida pensando en los errores del pasado y nos olvidamos de su gran amor y fidelidad.
No podemos olvidar que, como seres imperfectos, debemos comprender que para acercarnos a Dios no debemos ser Perfectos, por el contrario, debemos acercarnos tal y como somos.
Dejando que su amor y fidelidad moldeen nuestras vidas.
Recuerda que no importa si hemos caído, ni el tamaño de nuestra falta, mientras estemos vivos, siempre habrá́ una nueva oportunidad para reivindicarnos y enmendar nuestros errores ante Dios.
Oración: Amado Padre, hazme entender que tu amor y misericordia se renuevan cada mañana, libérame de la culpa, crea en mi tu corazón y ayúdame a seguirte sin importar mis debilidades.
¡Amén!
Álvaro Uribe Cerchiaro