Con el tiempo corriendo en contra, aumenta la expectativa sobre la respuesta final por parte del Gobierno nacional, que se comprometió en definir el día de hoy su posición sobre la realización de los Juegos Panamericanos 2027 en la ciudad de Barranquilla. En medio de un ambiente de gran optimismo, los barranquilleros y en general la región Caribe, espera una respuesta positiva que traiga el empujón que se necesita para la preparación de unas justas deportivas con todas las de la ley, como acostumbra a brindar la Arenosa.
En el 2018, Barranquilla confirmó como anfitriona de los Juegos Centroamericanos y del Caribe, la grandeza que tiene como ciudad a la hora de encarar este tipo de retos. Actualmente, tenemos la ventaja de contar con 13 escenarios deportivos, incluyendo el estadio Metropolitano, que solo requieren algunas remodelaciones y mantenimientos para estar listos en el 2027. Sin embargo, hay obras nuevas que se deben desarrollar pronto, como el velódromo y el Coliseo Mayor.
Aunque el Distrito se ha esforzado por cumplir con las exigencias contempladas en el contrato, que también fue suscrito por el Gobierno anterior, y la Gobernación del Atlántico, el desarrollo del evento multideportivo más importante después de los Juegos Olímpicos, que alberga a más de 7 mil atletas de 41 países, exige la participación activa del ejecutivo con disposiciones presupuestales, fiscales, y de infraestructura, para asegurar su éxito.
Apremia la respuesta del Gobierno, que tras meses de manifestar su voluntad de respaldo, aún no concreta oficialmente su posición. Esperamos que la ministra de Deporte, Astrid Rodríguez, impulse al ejecutivo a pasar del dicho a los hechos para concretar un evento que sin duda traerá desarrollo deportivo, social, turístico y económico no solo a la ciudad de Barranquilla, sino también a todo el país.
Honrar el voto de confianza que le otorgó el Consejo Directivo de Panam, a la ciudad de Barranquilla y al país, en su elección como sede de los XX Juegos Panamericanos es de capital importancia. Incumplir un contrato de este tipo significa exponernos a un veto en futuros eventos internacionales y que se mancille el buen nombre de la capital del Atlántico.
Somos conscientes que la actual coyuntura de las finanzas públicas colombianas no es la más fácil, pero consideramos que la inclusión de los Panamericanos 2027, como proyecto estratégico para el departamento en el Plan Nacional de Desarrollo fue una decisión acertada por el impacto que generará en el territorio nacional. Necesitamos que el Gobierno confirme su apoyo financiero con la asignación de las partidas presupuestales necesarias y la pronta construcción de un Conpes para asegurar los recursos.
La realización de la XX versión de los Juegos Panamericanos en Barranquilla es un sueño que ha unido a las autoridades locales, departamentales, el Caribe y a todos los sectores. Por mi parte, como ciudadano y Senador de la República estoy dispuesto a colaborar en todo lo que sea necesario para que Barranquilla cumpla exitosamente el compromiso que ha adquirido ante la comunidad internacional
Queremos ser en el 2027 los anfitriones de los mejores Panamericanos de la historia. Que con el decidido apoyo del Gobierno Nacional la bandera de estas justas, se quede en Barranquilla.
José David Name Cardozo