Ahora bien, ¿para qué vamos a seguir dando espacio a sus actuaciones ridículas? No, señoras y señores. Lo mejor que podemos hacer es mirarlo desde lejos, como quien observa un experimento fallido en un laboratorio abandonado. Que siga haciendo discursos interminables ante un público de “primera línea” obligado a aplaudir. Que siga visitando obras que […]