El grupo de investigación Creciendo de la Universidad de La Guajira Sede Fonseca, liderado por las docentes Meredith Jiménez Cárdenas y Ángela Sierra Parodi, ha visto la necesidad de abordar, intervenir y proporcionar estrategias en los colegios del sur del departamento, con el objetivo de mejorar la salud mental y calidad de vida en los adolescentes.
Este proyecto de extensión se enfoca en los estudiantes de sexto grado del colegio Margoth Maestre de Ariza, en el municipio de Distracción, a quienes se les brinda orientación sobre la prevención del suicidio. Las investigadoras reconocen que el suicidio es una respuesta trágica a situaciones de vida estresantes, pero destacan que es una situación prevenible. Es por eso, que enfatizan la importancia de identificar las señales de advertencia y de buscar ayuda profesional de manera oportuna.
«El aumento en el consumo de sustancias como drogas o alcohol y los cambios en los patrones de comportamiento son problemas que actualmente afectan a los alumnos, y son indicadores importantes de que alguien podría estar en riesgo. Por eso, el proyecto se centra en enseñar a los jóvenes a reconocer los signos de advertencia y a hablar abiertamente sobre el suicidio», comentó la docente Meredith Jiménez Cárdenas.
Entre las cifras de alerta sobre posibles pensamientos suicidas, según la investigación, se encuentran expresiones como «me voy a suicidar», «desearía estar muerto» o «desearía no haber nacido». Además, aislarse socialmente y experimentar cambios drásticos de humor, como pasar de la euforia a la profunda tristeza en poco tiempo, y como estos, otros factores que pueden influir en la toma de una mala decisión.
Por su parte, el rector del colegio Margoth Maestre de Ariza, Luis Carlos Alvarado del Castillo, expresó que «este proyecto está actualmente en su fase de ejecución. Hemos brindado las herramientas necesarias para disminuir los casos de suicidio entre nuestros estudiantes y estamos comprometidos con la creación de una comunidad escolar en la que cada joven se sienta valorado y protegido».
El directivo concluyó que la implementación de estas estrategias permite identificar elementos de riesgo y promover un entorno educativo más saludable y consciente. «Es fundamental que los alumnos se sientan apoyados y comprendidos, y que sepan que cuentan con recursos y personas a quienes acudir en momentos de crisis», manifestó.
Para la Universidad de La Guajira, es importante que los docentes se involucren activamente en el contexto social para ofrecer soluciones rápidas y efectivas a las problemáticas que lo afectan. A través de estas investigaciones, no solo se abordan de manera inmediata los desafíos que enfrentan las comunidades, sino que también se garantiza una respuesta oportuna a las dificultades específicas que impactan a los jóvenes.
Universidad de La Guajira