“Dejá el “lloriqueo”, que el hombre que llora es marica y la mujer que llora es puta, llore el día que yo me muera y no tengo cuando!! Vamos pa’ arriba, a levantarse que ustedes no son ricos”, gritaba con fuerza en la marca de La Peña la Marquesa Celedonia, despertando hasta a los pajaritos. ¿Quién se quiere despertar a las 3:00 de la mañana? ¡Nadie!! Pero era la hora de levantarse todos en casa. Dependiendo la temporada así era la tarea, en tiempos de cosecha para recoger algodón, zorgo, ajonjolí, frijol y el resto del año para hilar magüey y convertirlo en pelotitas de cabuya de diferentes colores, que serían entregadas a cada hijo grande y a mi tía Maritza para producir las mochilas. “Las mías quedaban feas, las camuflaba una en cada docena pa’ venderlas” me decía tía Maritza. Cómo yo nací 3 años después que mis hermanos no alcancé sino a dar cadejos de magüey para que mami los empatara; me quedaba dormida y los daba mal, me llevaba mis palmadas y mis gritos. “despierta cataneja, #@¥€¢£, parece completá con miao” menos mal yo ni sabía lo que me estába diciendo. JaJajajajaja, a mis hermanas más grande les iba peor, los insultos para ellas eran de más grueso calibre, cómo se llegará a partir la cabuya trinaba y no era Twitter “mira prostituta pianolera, recarcadora de #$$&€¥, agarra bien la @#$&@#$ esa o te la parto en la cabeza” menos mal solo eran ofensas que jamás entendimos y amenazas que nunca se cumplieron. Si alguien sabe que significa pianolera, nos sacará a mis 5 hermanas y a mí de una duda eterna. Ni ella sabía lo que significaba, cuando le preguntábamos decía, yo que voy a sabé, pero sonaba imponente Jajajaja” ¡Que mujer!! ¡Que temperamento!! ¡Que temple!! Era sencillamente fantástica, inverosímil, sacada de un mundo irreal. Hoy quiero honrarla y celebrar su vida, porque ¡!vive!! Es tan dueña del mundo, ella, que se va a morir cuando ya no haya memoria que la recuerde. Ella vive.
“Ya regresa nuevamente el 23, día bonito que me llena de entusiasmo, ese fue el día, ese fue el día que a mami a este mundo la mandaron” canto “Diome”. ¡Los 23 de agosto siempre fueron y seguirán siendo especiales!! Que yo recuerde, no hubo un solo 23 de agosto que no se haya celebrado en 77 maravillosos años, lo digo por los 47 que yo viví. Serenata, flores, desayuno, almuerzo y cena especial, fiesta con lo que ella mandara. Y si hay que celebrar que el rompimiento sea con “Mede” (Diomedes Díaz) cómo ellos jugaron boliche cuando pequeños, ella lo llamaba como le daba la gana. “Cuántos clavelitos nacería junto contigo, cuántas rosas blancas ese día también nacieron… y que lo cumplas feliz muy feliz, deseamos todos en esta reunión, tus familiares llegamos aquí, a compartir esta gran bendición” su favorito en el mundo mundial, fanática acérrima.
A mi mamá le gustaba cantar, y era muy afinada, la recuerdo cantando Amor Comprado, que me lo aprendí oyéndola “Como tú dices que vendes tu amor vendélo pronto, vendélo pronto, que yo no tengo pa’ comprártelo hoy, pero mañana talvez de pronto y esto lo haría pa’ que te convencieras que el amor comprado nunca es sincero, ese que se consigue sin moneda ese si es puro y verdadero” cantaba ranchera, vallenato, charanga, canticos religiosos, de todo. Le sonaba bonito en las madrugadas de mayo: “madre mía que estás en los cielos, envía consuelo, a mi corazón… cuando triste llorando te llamé, tus manos derramen feliz bendición… y alumbre en mi mente y alumbre en mi me te tu luz celestial” wow!! ¡De verdad sonaba celestial!! En las misas del 19 de julio, se escuchaban por encima de las demás voces, la de ella y la de María Elena, su prima. Quizá hubiese sido una buena cantante, de haber nacido en otro tiempo.
¡Bailadora fina!! Úuuiii, le encantaba la música de viento, los merengues vallenatos y dominicanos, las charangas: la música rápida. Su parejo favorito era su yerno, “El Mono” Sierra, (me parece que tiene una balinera en la cintura), ¡“hombre pa’ baila rápido en la vida!! Así es que se baila, pero me va a matá un día de estos” decía. Terminada la misa de las 10:00 de la mañana los 19 de julio, la banda Rita Cecilia del Molino iniciaba una tanda que parecía escogida por ella: El Muñeco, Lirio Rojo, El toro Negro, El Muerto Borracho, El guayabo de la Y, impélales. Junto a su comadre “Pacha” y las hermanas, Nuris y Martha, abrían la pista (el atrio de la iglesia), las seguian Carolina, Mirian, Griselda, Yudis, María Concepción, Rosa Beatriz, y otras tantas mujeres alegres y divertidas de La Peña. Los 23 de agosto se bailaba a todos los hombres de la familia, bailando conoció a mi papá, bailar es un don que Dios le dio y nos lo delegó.
Que color luzco este año, decía unos días antes de cada 23 de agosto, ¡Ay Dios!! Con el tiempo aprendimos que fiesta sin rabia e insultos de mami, no quedaba buena y que por hermoso que fuera el vestido ella tenía que torcer la boca y decir que no le gustaba como le quedaba. Pobres modistas, nunca hacían la moda que ella había mandado a hacer, “Una bolsa, mira este pantalón bolsú… este vestido debe entallar aquí y parece es un saco tres rayas, un jolón sin forma… esta blusa quizás para quien la hizo porque está no fue la moda que yo mandé a hacer…” oh mi Dios!! optamos por llevarla a comprar ropa o comprársela, no sé si por pena o porque en verdad le quedaban mejor, pero bajaron los índices de queja, pero jamás dejo de torcé el hocico y mostrar desagrado. Jajajaja. En raras ocaciones le pegabanos a la lotería, y cuando algo le quedaba bien decía: “este si me encaja al pelo! ¡De caché Manco Viejo!!,” levantaba el dedo pulgar y hacia un sonido gutural, la sonrisa Nos confirmaba lo que decia. Vestido, zapatos, juego de accesorios, bolso perfume, uñas y maquillaje, obvio los labios rojos.
Reunir a su familia le causaba entusiasmo, un deleite tener a sus 9 hijos 3 claveles y 6 rosas, a sus 27 nietos, sus 13 bisnietos, (ya hay más) era un asunto principal, la comida debía estar definida con antelación, ese asunto era directo conmigo, su cheff o mano derecha en la cocina. Hicimos de todo, desde la típica, hasta la gourmet; obviamente en los inicios solo típica, carne de res, carnero, cerdo, gallina, pavo, pollo, bocachico, en todas sus presentaciones, para entonces era especial que el plato llevara ensalada y que el jugo fuera de fruta. Ella pulió mi arte culinario, no solo porque me indicará, sino porque me exigía y me estimulaba al comienzo era doloroso oírla: “no cocinaste con gana, esto no sabe a na’ será pa’ echasela a los perro” claro que la mejoraba y quedaba “exquisita” según sus términos. Luego que aprendí nadie cocinaba mejor que yo, “Si tú no veníi, no se hace nada porque aquí la única que sabe hacer eso eres tú”. Me comprometía. Una fecha especial de nuestra cocina juntas era semana santa, hacíamos dulces, de todos los sabores, arroces, pescados, frijoles y su famoso pícaro, era todo un ritual año tras año. Ella me hacía volá, “ya tengo el ñame, los cocos, las auyamas, las papayas, lo mangos, las piñas para los dulces, pero si tú no veníi ahí se quedarán” me decía con ese tonito manipulador que todos conocíamos y sin embargo nos dejábamos manipular. Disfrutarla no tenía precio.
Recuerdos coloridos y festivos vienen a mí mente hoy que quiero celebrar el onomástico de quién mañana agregara una perla más, para completar 80, al collar de su existencia que se cortó a los 76 aún recuerdo aquella tarde cuando recibí la esperada llamada, a ver qué resultados mostraban los procedimientos que le había hecho. ¡Negra!! ¡Se nos pusieron los mojoncitos de aretes manita!! Imagináte tuvieron hasta que resucitarla con las planchas eléctricas en el pecho, cómo en las películas, no daban con lo que era, los resultados de los procedimientos de ayer salieron bien, tiene corazón de quinceañera por ese la’o hay Mamá Cele pa’ rato… ¡Pero hoy casi se nos muere mi vieja!! ¿¡Le hicieron unos nuevos laboratorios y Adiviná!? Un coma diabético. Ay mi vieja, casi me la llevo de un gancho e’ caña… no veí que le traje un jugo de esos poderosos, ¿para animarla porque no quería comer nada y de qué creí que le hice el jugo? De remolacha con leche, sorbetico, ¡cómo le gusta a ella… úuuii, úuuii!! …Pero si ella mantiene sus niveles de azúcar bien, ¡quién iba a saber!! Ay Negra manita, yo que me hubiera hecho si mamá se nos va por un coma diabético, ¿después de un jugo que yo le di? Chaaaachaaaaaa… Uuuiiii Dios me ama y ama a mamá” Todo esto me lo decía la “Flaca” en medio de risas nerviosas, mientras esperábamos que mami se recuperara y le dieran de alta después del cateterismo y otro procedimiento coronario que le hicieron el día anterior. Ese día mientras oraba para darle gracias a Dios por los resultados y por resucitarla, Dios me habló y es la conversación más difícil que he tenido con El…
-Prepárate porque llegó el final.
-¡¿Que?!! ¡¿Cuál final?!
-El de tu mamá. ¡Prepárate!!
No entendía, todo salió bien, tiene corazón de quinceañera, ¿cómo que es el final?? Pasé varios días semi muda, solo resonaban esas palabras en mi mente, ¡Es el final… prepárate!! Había escuchado este anuncio, en otras ocasiones, para otras personas y era doloroso, imagínense, recibir el de mi propia madre. ¡Terrible!! Más hoy lo agradezco, porque tomé la decisión de irme cada fin de semana y al salir de vacaciones el mismo día me fui a estar día y noche ahí, cómo Joaco Guillén, pegaita al pickup. Nada de lo vivido en todos mis años con ella los cambiaría por los últimos 3 meses y 21 días; absorbiendola, disfrutándola, soltándola, perdonándola, amándola, sobre todo amándola.
Feliz cumpleaños en el cielo para mi mami, inolvidablemente bella bella. Cocinaré para ti cantaré y bailaré Lirio Rojo y me pintarme mañana los labios en tu honor. Siempre viva en mis #LabiosRojos
Noralma Peralta Mendoza
Exquisita, como las sopas de piedras en rio badillo despues del carnaval, porque juancho llevo la atarraya y no habia ni un solo bocachico en el rio cesar. Ocha quedo con el boca agua en todo el trayecto iba peleando los gorditos de los pezaco, y se comio los gorditos de las maggui.
Primo páseme esa historia a mi privado x fa, esa va para el libro
Lindas palabras, hermosos recuerdos, que grande «mama Cele» de su cachaco hermoso….siempre en mi corazón!!!!
Única y bella ❤️
Leerla a mi hermana es siempre un honor pienso que escribe como solo ella sabe hacerlo … lindoooo. pero leerla cuando habla de mamá es más que un honor es dolor mezclado con amor es traer al presente un pasado que nunca olvidaremos es saber que mañana tengo que llevarle flores a mamá porque es 23 de agosto y ese día está tatuado en nuestras vidas porque ese día se vivía de manera intensa, ese era un día en la vida … feliz cumpleaños mamá ya te compre rosas son rojas esta vez
Leerte mi hermana es un honor porque escribes tan lindo tan agradable al ser pero leerte cuando escribes sobre Mamá es una mezcla tenaz de amor, dolor, ausencia porque una madre jamás se olvida así este en la ciudad del cielo sin poderla ver … y es que ese 23 de agosto era una fecha fundamental para la ella y para la familia de paso todos teníamos que estar … feliz cumpleaños madre mía ya compre rosas para ti como siempre esta vez son rojas te las llevaré mañana al lugar donde vi que estabas la última vez
#labiosrojos #amandotedeotramanera