Felicitaciones Colombia, el domingo 19 de junio, gano la democracia- Colombia logro derrotar al discurso del miedo, somos valientes porque hoy logramos derrotar nuestro propio miedo.
Colombia necesita de toda su gente, necesitamos urgentemente una reconciliación Nacional con todos sus actores políticos, sociales y alzados en armas, una reconciliación total que permita sanar muchas heridas y nos traiga la tan anhelada paz al país colombiano- hoy tengo que decir con muchas esperanzas que gano Colombia, gano la valentía al miedo, ganamos todos porque Gustavo Petro es nuestro presidente.
Mucho estarán analizando lo que sucedió en la segunda vuelta presidencial, cada quien le da la lectura que quiere a lo sucedió, pero intentemos desde este espacio interpretar de una manera muy objetiva lo que paso el día de la independencia como muchos colombianos le empiezan a llamar al 19 de junio. El mapa de los departamentos donde Gustavo Petro ganó, coincide con los territorios en donde la pobreza extrema, la inequidad, el abandono estatal y la violencia hacen parte del día a día, es una triste realidad que los colombianos debemos aceptar como tal, no es como muchos analistas y periodistas quieren hacer ver a esa parte del país, señalándolos, como territorios cocaleros.
Muchos tendrán incertidumbre sobre lo que va a pasar con el aparato productivo colombiano, lo que va a suceder con las empresas, el rumbo económico, político y monetario que tomara el país. Nuestro presidente electo tiene una responsabilidad enorme para favorecer a las comunidades más pobres y tratar de llevar al país por el mejor camino posible.
Durante el debate político, Gustavo Petro tuvo una férrea oposición a su programa de gobierno y lo que él, propone hacer para mejorar la situación de nuestro país, decían los contradictores, que sus programas son totalmente irrealizables, esperemos a ver qué sucede, para la verdad, el tiempo como dicen los sabios. Desde ya, hay que empezar a trabajar como sociedad que queremos un pronto cambio, la clase política y empresarial tienen que unirse para avanzar, porque es muy claro que el país no lo hace y no lo cambia solo un presidente, lo hacemos quienes vivimos en esta Nación. Las empresas y nosotros como líderes del cambio, tenemos una tarea más fuerte ahora y es sembrar optimismo, concentrarnos en sacar nuestro país adelante bajo el interés colectivo, redefiniendo estrategias y cambiando las propias políticas empresariales basadas en propuestas más humanas y menos disociativas para la sociedad misma. Debemos superar las diferencias y las divisiones, pero seguir manteniendo nuestro criterio y carácter, elevando nuestros discursos, porque hoy más que nunca, tenemos democracia en este país.
Colombia empezó a vivir días gloriosos como lo expresó el día domingo en su alocución de triunfo, nuestro presidente electo Gustavo Petro- quien promueve la participación ciudadana en el desarrollo de la educación pública, en la cultura, el desarrollo económico, social y empresarial- Petro nos está invitando a cambiar la historia de Colombia, teniendo en cuenta el respeto al opositor, no habla de venganza, el olvido y el perdón serán nuestras únicas armas, en sus palabras logre notar sinceridad total. Siempre hemos dichos que los grandes hombres son los que más sufren durante su vida, pero tiene a la vez las más grandes compensaciones, y hoy Dios y el pueblo colombiano le ha dado esa compensación para dirigir el futuro de nuestra sociedad colombiana a nuestro presidente electo.
Sus palabras son alicientes, a un pueblo sufrido, maltratado y excluido, sus palabras de aliento después de la censura, son como el sol tras el aguacero. Gustavo Petro nos dice que el estudio y el trabajo son los medios seguros para vivir en independencia, en libertad- esa la libertad para poder soñar con la vida, esa libertad para vivir en paz, esa libertad para que los niños puedan disfrutar de la vida y, esa libertad para vivir sabroso. Eso esperamos todos los colombianos, Presidente, usted tenía muchos años esperando esta oportunidad, Dios y Colombia se le ha dado. Amar y perdonar, es la vida para una persona, porque derribar sus promesas es quitarse a sí mismo el primer apoyo que la vida le da, por tal razón es que Petro se tiene que preparar para gobernar en tiempos disruptivos y, es ahí donde tendrá que tener el tacto, el carácter y la sabiduría para buscar las mejores estrategias a utilizar en estos tiempos disruptivos para sacar adelante al país.
Hoy más que nunca debemos ser vigilantes de lo que suceda en nuestro gobierno, porque nosotros como sociedad, estamos es para ayudar y pedir cuentas a un gobierno, no para ser cómplice como siempre fueron con los gobiernos pasados.
Con la victoria con Petro no creo que sea una ocasión para celebrar nuestro triunfo, pero quizá debemos entender que el 50% más 1, no aguantaba más esta crítica situación social, económica y política que hemos vivido los últimos 20 años, hoy celebran los pobres de Colombia, la clase obrera, los profesores, los pensionados, los artistas, los estudiante, todos y todas, nos hemos dejado seducir por ese cambio y le apostamos a ese cambio con Gustavo Petro- durante la campaña aclare que no soy comunista, que no era de izquierda como muchos me querían señalar -yo soy Liberal de pensamiento y ejercicio político- pero que no necesitaba ser de izquierda para ver a Gustavo Petro como ese candidato que encarnaba el cambio que yo como profesional, como docente de una Universidad pública y como sociedad maltratada quería apostarle a ese cambio y, les confieso algo, no tenían nada que perder. Por esa y mil razones más, es que hoy manifiesto que nosotros los guajiros debemos de seguir trabajando con esa manera tan enérgica que nos identifica a nuestra raza indígena y acoplándonos muy rápidamente a las nuevas responsabilidades que debemos asumir nosotros como sociedad, para no quedarnos afuera de la dinámica del cambio que ofrece este nuevo gobierno.
Álvaro Sierra Molina