Todos los que se encuentran reunidos aquí sabrán que el SEÑOR no necesita espadas ni lanzas para salvar al pueblo. ¡La batalla es del SEÑOR! Y él nos ayudará a derrotarlos a todos ustedes, filisteos.
1 Samuel 17:47
Un hombre de fe se caracteriza por hablar y caminar en fe, dicha fe lo llevará a vencer cualquier obstáculo. Sin importar las posibilidades que pueda tener en su contra.
En la vida de David encontramos un gran ejemplo de esto: David un simple muchacho, que no tenía ningún tipo de posibilidad frente a Goliat, pero Dios le dio la victoria y de esta manera honró su fe y valentía.
En ocasiones nuestra vida se encuentra como la de David, sin posibilidades de obtener una victoria.
Es en ese momento donde nuestra fe y valentía deben salir a la luz y de esta manera avanzar creyendo en lo que dio ha dicho de nosotros.
Recuerda que la duda te acerca a la derrota, la fe te impulsa a la victoria.
Oración: Amado Padre, que tu fe me acerque a la victoria, quita de mi corazón toda duda. Ayúdame a ser fuerte y valiente. Que tu inigualable amor crezca en mí.
¡Amén!
Álvaro Uribe Cerchiaro