Hoy en mi crónica les hablare de un hombre fuera de serie, un ser humano como pocos se ven hoy en este mundo donde prima la modestia, se trata de Arnoldo Marulanda Britto, crecí viéndolo con un gran número de jóvenes siguiéndolo para ir a reclamar por una nota donde el maestro aquel era intransigente, que al entregar su nota decía esa es y no hay derecho a reclamos, pero sin embargo el rodeado de jóvenes enfrentaba al maestro para pedirle una revisión de examen y ayudar al estudiante desesperado porque perdía el año y sus padres no tenían como darle más estudios.
Ese nono profesor de educación física el que ayudaba a todos los estudiantes desesperados, el mismo que cuando lo elegían presidente del festival sin cobrar nada a cambio, ese Nono Marulanda que aspiró a la alcaldía haciendo su campaña con los más humildes y que cuando fue elegido jamás perdió su humildad, al cual Yeyo el de Micaela, mi madre y mi hermano entraban a sus despachos humildemente vestido sin previo aviso lo atendía dialogaba con él y hasta salía con dinero así fuera para el sustento de su hogar.
Es de resaltar en este ser humano Nono Marulanda la verdadera humildad, quien nunca ha tenido nada de él, lo que tiene es de todo el que lo necesite, tanto así que cuando fue alcalde y era día de pago veíamos la oficina del alcalde y los corredores lleno de gente humilde esperando un billetico, decía doña Miriam su esposa, ahora llega a su casa limpio lo reparte todo. Porque así era repartía todo el sueldo como alcalde y llegaba sin un peso a su residencia.
Cabe destacar que uno de eso días de su mandato como alcalde, el recordado Encanto (Q.E.P.D.) dijo: “Quiero entrar al despacho para hablar con Nono”, la secretaria lo hizo pasar y Encanto se sentó y subió los pies sobre el escritorio y le dijo este era un sueño que yo tenía hace años, pero ningún alcalde me lo permitió solo tu nono que eres humilde como yo. Esa es la verdadera humildad ni la que pregonan algunos políticos y luego cuando llegan al poder se olvidan de aquel humilde labriego, mototaxista, lavandera o vendedor de chance que lo apoyo durante su campaña electoral y muchas veces no responden el celular y lo que es peor cambian de número; es una verdad que quería traer a colación.
Recordemos que es la humildad y quienes la practican verdaderamente, la humildad está definida como “el conocimiento de las propias limitaciones y debilidades y obrar de acuerdo con ese conocimiento”, la humildad etimológicamente proviene de la palabra “humus”, que quiere decir fértil, tierra. Ya que el humus fertiliza y hace crecer la tierra. La humildad es justo lo contrario de soberbia. Pero, también, es lo contario de a la modestia. Porque la humildad es verte al mismo nivel que los demás. Ni por debajo, ni por supuesto, por encima de ti. Desde la humildad, da igual la persona con la que interactúes, su nivel cultural, u raza, género o estatus. Ves a la persona, aprendes de ella y creces con ellas. Y eso es algo que te pierdes si te colocas por encima de los demás. Así como lo es Arnoldo Marulanda Britto, hoy diputado del Departamento de La Guajira, un ser humano verdaderamente humilde. Las personas humildes escuchan al otro, lo respetan, no imponen su criterio y no tienen problema en reconocer que se han equivocado. Pero, tampoco, se vanaglorian de sus éxitos, no presumen de ellos, aunque sí que se los reconocen.
Una de las definiciones de humildad, es el conocimiento de sus limitaciones y debilidades y obrar de acuerdo con ese conocimiento; esto significa que tenemos que saber “que” es aquello que tenemos que mejorar. Como el humus a la tierra, la humildad nos proporciona a las personas la oportunidad de crecer y mejorar. De convertirnos en algo más grande. Puedes saber que tienes que mejorar en algo y rodearte de los mejores para aprenderlo, trabajarlo y dedicar tiempo para conseguirlo. Y, también, puedes saber que eres bueno en otra cosa. Esto te hará completo.
Y esto fue lo que en gran medida ayudo a llegar a la duma departamental a Nono Marulanda, ya que sin gastar grandes sumas de dineros en campaña porque el sí supo colocarse por encima y por debajo sin compararse con los demás. Este gran hombre lo definen las características de las personas humildes: se conocen y reconocen, valoran el trabajo y esfuerzo de los demás, escuchan diferentes opiniones y las toman en cuenta, se expresan con asertividad, respetan y son respetados.
Nuestro personaje ha demostrado en todos los momentos de su vida una mentalidad de crecimiento, pide perdón y perdona, intenta ser feliz y no tener la razón, se muestra accesible y se pone al servicio de los demás, admira a los que ya lo hacen y por sobre todas las cosas es agradecido. Busca referentes de humildad entre las personas de tu diario vivir que están cerca de practicar es su valor como lo es la humildad verdaderamente, practicada sin falsedad por el personaje Arnoldo Marulanda Britto, diputado de nuestro departamento quien siempre repite “la vida es una larga lección de humildad, así que … ¡Aprende y disfruta de ella!” y a pesar de que ha ocupado grandes cargos como docente, como coordinador del Festival de Compositores, como alcalde municipal de San Juan del Cesar y ahora como Diputado jamás ha perdido ni perderá su humildad.
Ana Cecilia Fuentes