“Como hare para olvidar esos ratos tan legal que pase contigo”
No encontré una manera diferente para iniciar nuestra crónica en esta oportunidad tan especial para todos los Monguieros, vino a mi mente la parte preliminar transcrita de la canción “Aunque sufriendo de olvido” de la autoría de Máximo Móvil porque así dice el pueblo más dulce de La Guajira al recordar que en el mes de diciembre próximo se cumplirán los primeros cuarenta y nueve años de aquel 25 de diciembre de 1976 cuando Beto Zabaleta y Emilio Oviedo estrenando en nuestra región su LP “Recordaciones” su trabajo antológico hicieron su primera de dos presentaciones durante la celebración del Segundo Festival del Dulce de Leche, ellos tocaron 25 y 26, algo normalito en aquel tiempo cuando se vivía sabroso, Beto y Oviedo durmieron con su agrupación en “El local viejo” de la escuela a donde estudie la primaria.
Lo de Beto Zabaleta con Mongui fue amor a primera vista, con nosotros ha estado en nuestros festivales con todos sus compañeros de fórmula, menos con Saúl Lalleman, la última vez con Emiliano Zuleta, han sido cincuenta años continuos de admiración, seguimiento, fanaticada fiel y de buena vibra para todos en el pueblo, su música de ayer y de hoy es ineludible en las parrandas de las actuales y pretéritas generaciones y es el motivo por el cual, por aclamación de la gente quienes hemos estado al frente de nuestro Festival no dudamos en acoger dicho clamor y haremos todos los esfuerzos para que Beto este año nos acompañe porque el 21 de diciembre próximo queremos testimoniarle nuestra imperecedera gratitud declarándolo a el Hijo adoptivo de Mongui.
Hablar de Zabaleta en mi pueblo es referirnos a uno más de los nuestros, todavía yo estaba muchacho y recuerdo que la caseta que se acababa de construir ladrillo a ladrillo con el esfuerzo de todo el mundo y contra reloj, y como maestro de obra Dalmiro Barrera Q.E.P.D. tenía apenas setenta y dos horas de haberse terminado de levantar paredes, fue en medio del mas inclemente invierno que he visto en el sector, no quedo gente en los pueblos circunvecinos que no fueran a conocer a quien cantaba El desengañado, Recordaciones, Aunque sufriendo te olvido, Pueblo oscuro, El milagro y todos los demás éxitos porque todo el LP pegó, había gente guindada hasta de los palos, de ello tengo el registro en audio de la presentación en la cual incluyó como buen admirador de Poncho Zuleta “Como has quedado” que estaba dando palo.
Lo que se hará con Beto será un acto de justicia, no lo decidimos nosotros lo decidió la más importante de las “Ias” la ciudadanía fiel a su música, a su voz y a su canto y es algo inherente a la gente buena ser agradecido, las canciones que Beto canta son himnos en Mongui, no ha habido nueva ola, brincadera, ni salchipapas que hayan podido silenciar al ilustre Molinero en el corazón de todos, y la verdad que está plenamente justificado EL reconocimiento que le haremos y todo lo que hagamos para que este en ese lugar sagrado a donde se le respeta y se le admira, no será fácil por su nutrida agenda y porque el nuestro no es un Festival de negocio, allá no se le cobra nada a nadie, lo hacemos pasando el sombrero, con la generosidad de nuestros amigos y familiares y el apoyo muy significativo de Sayco regentado por otro caballero que se robó el corazón de Mongui, Rafa Manjarrez cuyas canciones cantadas por Beto todos nos las sabemos y quien también recibirá un gran reconocimiento durante la fiesta.
Mucha agua ha pasado debajo del molino desde el 25 de diciembre de 1976 cuando fue coronada Reina del Dulce Graciela Campo “Chela” representante del corregimiento de Dibulla no fue como no ha sido fácil para ningún jurado escoger a la soberana que funge como embajadora de nuestro buen nombre dentro y fuera de nuestros alares, porque históricamente todas han tenido méritos para ser coronada pero solo una puede ser coronada como reina, ya los desfiles con las carrozas no se hacen con camionetas F100 que estaban de moda, no hay que hacerlas entrar cargadas a la caseta por las piedras y barro al frente , ya no hay filas cada noche frente a un Hueco en la pared a donde la gente tenía que acudir a comprar “La boleta” que fabricaban Ángel mi hermano y sus laterales con un sello húmedo para ingresar al baile que entre otras cosas en una apuesta arriesgada a “Los conjuntos” se les pagaba con el producido de la taquilla durante cada noche, allí en vivo y en directo después de doce de la noche se encerraban la junta organizadora con el “Representante” del conjunto para contar y entregarles la plática del toque, menos mal el billete siempre alcanzaba, Beto lo tiene que recordar.
En aras de la justicia hay que reconocer también que después de esa noche inolvidable Emilio Oviedo también quedo enamorado de Mongui y Mongui de su música porque aun después de haberse separado musicalmente con Beto fue contratado muchas veces para tocar en los festivales, recuerdo que lo hizo con El Kate Martínez y con Papi Díaz entre otros.
En este cuasi cincuentenario en nombre de mi pueblo pedimos a Dios cincuenta años más de vida musical para “El todoterreno del vallenato”, lo necesitamos para que siga con su canto predicando con el ejemplo de su profesor y referente Poncho Zuleta, y así como hay que destacar que con Los Hermanos Zuleta se le apareció la virgen el día que le dieron la oportunidad de cantar una tanda en Villanueva y por eso Emilianito se lo recomendó a Emilio Oviedo, del mismo modo sé que Beto tiene presente que Mongui tuvo buena espalda para él, fuimos los primer pueblo del sur de Riohacha que contrató sus servicios, es más cantó en Mongui antes de cantar en Riohacha, todos los que estaban manejando platica en los negocios de moda que fueron a verlo al festival comenzaron a contratarlo para las fiestas en todos los demás pueblos.
Lástima grande que ya muchos de los miembros de la Junta Organizadora ya no están con nosotros, pero desde el cielo nos habrán de acompañar, Edgar y Chente Acosta, Yohelia Medina, Alcides Peralta Mendoza, Omar Fuentes, Miguel Campo, Arístides Gutiérrez, con la ayuda de ellos desde su morada eterna haremos otra versión exitosa del festival de los pueblos a donde todos tenemos el privilegio de disfrutar a plenitud nuestro derecho de ser felices, porque eso es nuestro festival felicidad, por algo nunca durante su realización se ha producido ni una pelea a los puños.
¡QUE VIVA BETO Y QUE VIVA MONGUI CARAJO!
Luis Eduardo Acosta Medina


Talento con sello Monguiero 💪