Corriendo el riesgo de que me lluevan rayos y centellas que, mis lectores de extrema derecha, de los partidos tradicionales y sus obsecuentes se desfoguen en mi contra por las apreciaciones que esparciré en este escrito. Plantearé hipótesis divergentes sobre el lamentable capítulo de la descomunal tramoya de corrupción desatada en la UNIDAD NACIONAL PARA EL RIESGO DE DESASTRES. En primer lugar, debemos resaltar las particulares características de la entidad, las cuales facilitaron las faenas venales que repentinamente y como un maremoto han develado su podredumbre. Nos referimos a la potestad que tienen sus ordenadores de gasto de realizar contratación directa, en un pais tan corrompido como el nuestro eso es “papita pal loro”. Esos singulares rasgos de contratación emanadas de la naturaleza del ente, aportan lo suyo al momento de explicar los incontrolables procesos deshonestos. Ni corta ni perezosa la mezquina oposición, en esta ocasión es que se ha venido a percatar y otorgarle al primer mandatario la imposible capacidad de prever, controlar y adivinar lo que hacen los 512, 000 funcionarios que tiene el Estado.
La derecha está de plácemes, en modo alguna dolida por el despilfarro de dineros públicos. No lamentan la corrupción desencadenada en esa dependencia gubernamental, no claman por la pérdida de dineros públicos y el alto costo de oportunidad que ello implica. Están felices porque suponen que estos escándalos restaurarán a ese espectro político descarado, inhumano, criminal y corrupto, en el poder. Pierden de vista que los macro escándalos de corrupción ocurridas en antepuestos gobiernos de su signo ideológico, superan con creces los montos pecuniarios y los desbordados niveles de impunidad, conocidos hasta la fecha y emanados del actual gobierno, en ese sentido. Por supuesto que en modo alguno justificamos el latrocinio, venga de donde viniere. Como diría el actual alcalde de Medellín: “plata es plata”, y a lo cual le agregamos de nuestra cosecha: “robo es robo”.
Quieren vender la idea, imponer la tesis de que en estas materias la derecha y la izquierda son iguales, nada más mentiroso. La izquierda ha sido reserva moral de este pais, por supuesto que varios militantes del progresismo han incurrido en actos venales. Pero en este caso corresponde más a la excepción que a la regla. No hay duda que existen marcadas diferencias. Los macro casos de corrupción de la derecha adquirieron un carácter sistémico, mientras que, en el actual gobierno, esa tara se ha concentrado en la UNGRD. La razón de ser de los gobiernos de derecha y sus militantes es la acumulación de capital, el enriquecimiento como leitmotiv. La filosofía que anima a los alternativos es la solidaridad y el desprendimiento con respecto a los bienes materiales. Lo cual no impide que haya algunas ovejas descarriadas.
Se vislumbra un propósito o una motivación absolutamente distinta. De ser cierta, de comprobarse la compra de congresistas, ello iba orientado a obtener mayorías legislativas para sacar avante las distintas reformas progresistas en areas como: salud, pensional, laboral que, finalmente se traducirán en mejorar las condiciones de vida y oportunidades en esos ámbitos a las clases más desfavorecidas. De ninguna manera razonamos que se acuda a vituperables estrategias para lograr dichas trasformaciones, pero podrían adquirir cierto grado de coartada dadas las motivaciones. Una cosa es comprar congresistas para reelegirse, lo cual implicó y se tradujo en un censurable beneficio individual y otro muy diferente hacerlo para que se puedan cristalizar reformas cuyo contenido es eminentemente social, altruista.
Las intimidades del programa Agro- Ingreso Seguro, cuyos beneficiarios fueron grandes terratenientes palmicultores e inclusive el hombre más rico de pais, con el ítem de que algunos destinaron una porción de lo recibido para financiar la campaña presidencial de Uribe en 2002 y el referendo reeleccionista, reflejan un enorme contraste con el uso dado a los bienes inmuebles rurales incautados a la mafia por la SAE, dirigidos a desarrollar la Reforma Agraria y cuyos beneficiarios han sido pequeños campesinos. En los gobiernos pasados algunos bienes desaparecían misteriosamente, otros eran entregados a personas de dudosa procedencia, y en ocasiones testaferros de quienes eran despojados por el comprobado origen ilícito de los bienes incautados. Son múltiples, interminables y en su mayoría permanecen impunes las faenas corruptas, atribuidas a los hoy día alborozados dirigentes de la derecha. Esas faenas truculentas suman centenas de billones de pesos
Ni hablar de Centros Poblados adjudicado en diciembre de 2020 por la suma de $ 70, 423, 000,000. 4 años después y derivado de esa monumental tropelía no existe ningún punto digital instalado y funcionando. Mientras que los carro tanques están allí. En un acto de malabarismo, sobredimensionando y magnificando lo sucedido la gran prensa, la oposición sin ninguna autoridad moral y ética, incluye y mezcla en un mismo bojote el valor de lo contratado con lo apropiado por los corruptos. Confunde deliberadamente lo contratado con los sobrecostos. En el caso específico de los carro tanques la suma que se robaron según datos de la propia Fiscal General asciende a $ 8,800,000,000, discriminados así: $ 7 mil millones en manos del contratista, $ 1,500 millones en poder de Olmedo y $ 300 millones en las manos de Pinilla. Sin embargo, y en su desmedido afán por desprestigiar al gobierno, ya la prensa acusó, emitió su veredicto y condenó.
Volviendo a Centros Poblados, a pesar de que Duque propaló a los cuatro vientos y se comprometió a recuperar los más de 70 mil millones, a la fecha solo se han recuperado $ 2,000 millones que equivalen al 2,84 % del total, y alguno de los implicados que revirtió la irrisoria suma de $ 186 millones se encuentra disfrutando de casa por cárcel. Mientras tanto y a modo de ilustrar las contradicciones entre ese descalabro y lo realizado en esas materias por el actual gobierno, y mediante un programa homologo denominado Centros Digitales se han instalado 13, 243 centros en los 32 departamentos lo cual beneficia a más de 991,000 estudiantes. Como decía el slogan de un entrañable amigo, candidato al Consejo municipal de San Juan: con cero corrupción.
Inexplicable la supuesta compra de congresistas, específicamente el caso de Iván Name o de otros, suena ficticio, ya que Name es precisamente la “mula muerta”, el abanderado del bloqueo institucional desde el Senado de la Republica. Lo que, si es evidente que, por lo menos no se vislumbra dentro de esa cadena, nombres de congresistas del Pacto Histórico. Se insinúa algo fantástico y sumamente improbable, por no decir imposible: la supuesta asignación de recursos al ELN. Suena descabellado y fuera del sentido común, pero ya se encuentra copando la vorágine mediática
En cuanto al rol de la nueva Fiscal en escasos cuatro meses desde su posesión, de los cuales dos fueron dedicados a poner en orden la casa, ya logró en el caso de la UNGRD que se haya acordado un Matriz de Colaboración, han imputado a los principales responsables y se están investigando las supuestas irregularidades en los contratos de Saravena, Sur de Bolívar, Cotorrra. Mientras que, en el caso de Centros Poblados salvo las medidas adoptadas contra dos contratistas; a 4 años de ese robo descomunal ni Fiscalía, ni Contraloría ni mucho menos Procuraduría han tocado “ni con el pétalo de una rosa” a los altos funcionarios responsables de tamaño desfalco. Es Vox Populi en Barranquila que la Procuradora Cabello y la exministra Abudinen, son contertulias frecuentes en restaurantes de la ciudad.
No podemos pasar por alto la oprobiosa gestión del ex fiscal Barbosa, caracterizadamente sesgado, igual que la Procuradora. Ambos haciendo uso selectivo y como herramienta de persecución política de tan importantes entidades. El desvergonzado y atorrante Barbosa, ese mismo que le “ echo tierra” a múltiples entuertos en los que estuviesen involucrados funcionarios del gobierno de su mejor amigo ( Duque), acaba de aparecer tal como es: pintado de cuerpo entero, destilando odio y expresando una opinión ajena a un análisis jurídico del caso de la UNGRD, y ubicándose en el terreno en que se desempeñó durante sus cuatro tormentosos y bochornosos años, dedicados a cubrir las espaldas a su “mejor amigo y al mecenas de este, planteando el asunto en términos políticos, bien distante de los términos jurídicos y penales como cabría de esperar, afirmando frescamente : el escándalo de la UNGRD le costará la Presidencia al Pacto Histórico”: como diría un humorista de Sábados Felices: insólito, increíble: los pájaros tirándole a las escopetas. Sus elucubraciones al respecto le valieron insultos y ultrajes hasta de sus propios ex copartidarios.
Finalmente, ojalá que cuando se comience a “barrer debajo de la alfombra”, es decir cuando se revelen los muy probables actos de corrupción que subyacen en la entidad (UNGRD), y cuya ejecución supere el horizonte temporal del actual gobierno, es decir que hayan sido ejecutados por gobiernos anteriores, la hirsuta y virulenta oposición que hoy día brinca de felicidad, asuma el mismo comportamiento inquisidor y beligerante adoptado hasta el momento.
José Luis Arredondo Mejía