A un (1) año de la desaparición del Busto de LUIS ANTONIO, EL NEGRO ROBLES, DE CAMARONES, o mejor dicho, el Robó perfecto, con casi 100 años desde su construcción, con un peso de 90 kilos de puro bronce fundido, el busto del Negro Robles que se encontraba en mal estado y arrinconado en algún lugar de la casa Museo que lleva su mismo nombre, hoy al parecer está haciendo mejor uso al público, los turistas y millones de personas que disfrutan y aprecian la hermosa escultura de bronce que brilla en la segunda etapa de la mega obra urbanística, el Malecón de Barranquilla.
Pero no es la escultura de Robles, ojalá, es nada más y nada menos que la escultura de la famosa cantante y estrella mundial, Shakira, quién fue construida, entre comillas » Para el mismo tiempo que se Robaron a Robles» paradójicamente con el mismo material, Bronce, aunque la Shaki lo tiene en capa exterior y rellena con cemento y partes huecas, ya que la escultura mide casi 3 metros de altura, nuestro busto Camaronero, era macizo de puro mineral.
Cómo doliente del pueblo de mis viejos y casi toda mi generación ascendente, me inquietó tanto que inicié una investigación sobre el tema, lo más curioso de este trabajo, fue la jocosidad con que tomaron los camaroneros el hecho delictivo, con cuentos coloquiales y naturales de la región.
Unos de los testimonios más sobresalientes fue el de un querido amigo, líder político y reconocido camaronero, que dijo, » EL NEGRO ROBLES ESTA EN LAS CADERAS DE SHAKIRA» de acuerdo a una indagación hecha por el, hoy el busto no existe, lo fundieron a las afueras del pueblo, en la región de la Enea, lo vendieron en el mercado negro para la construcción de la estatua de SHAKIRA, en Barranquilla.
De la misma forma, otros parroquianos, le dan credibilidad a la versión, ya que este busto, quien fue desmontado en el año 2016 de la plaza principal para una remodelación, fue trasladado al viejo teleconsito, hoy corregiduría o centro comunal, donde sesionan los ediles y se realizan reuniones, a la vista y al alcance de muchos, pero nadie le prestó atención ni era apetecido por los delincuentes; razones justificables para deducir o sospechar, que la oferta sobre el bronce, el peso y el valor, se volviera deseable para que cualquiera se desvare o salga de la pelua.
De tal manera y con ánimo de denuncia Penal, que este artículo, con una acusación que parece cuento de pueblo, tiene mucho de largo y de ancho, dentro de algunas verdades.
Lo más triste de toda esta historia, es que el Robó de Robles, a unos metros de la Policía Nacional, a la vista de mucha gente, literalmente fue al estilo SHAKIRA, nadie vio, ni sintió y ni escucharon, y las autoridades cantando la canción de La Barranquillera Pies Descalzos, se hicieron los locos, ciegos, sordos, mudos, torpe, tercos testarudos, convirtiendo está historia un delito bajo de impunidad.