“Valledupar, prócer ciudad, desde esa tierra que la quiero tanto, te traigo un abrazo, de paz y de amor, símbolo de confraternidad entre Guajiros y Vallenatos, que vibran al canto un mismo folclor”
Es indiscutible el olor a festival que se siente en todo el país, la Nueva Edición Rey de Reyes del papa de los Festivales Vallenatos se nos vino encima con sus virtudes y defectos, con sus novedades y sus chismes, y engreídos en su inminente reino se encuentran ya la Caja, la Guacharaca y el Acordeón, los tres hermanitos que unidos en sus inconfundibles sonidos alegran el alma de la humanidad que agradecida declaró su producto final como Patrimonio Inmaterial, imperecedero y con méritos para su preservación y salvaguardia.
Vienen en este tiempo a nuestra mente una vorágine de recuerdos gratos de esa fiesta grande con sabor a pueblo, hacemos reminiscencias de los días gratos que hemos disfrutado en la plaza y otros escenarios durante los concursos encontrando y reencontrándonos con buenos amigos que comparten con este cuerpecito el gusto por la música más importante del país del Sagrado Corazón de Jesús, vino a mi mente el aparte que antecede de la canción titulada “Con el alma en la mano” con la cual obtuvo Marciano Martínez el máximo galardón en el concurso de las canciones inéditas en el año 1988, triunfo del pariente Juntero y veredicto del Jurado largamente aplaudido por haber elegido entonces esa obra imperecedera como la mejor, ese tema musical fue grabado con justificado éxito comercial por Poncho Zuleta y Beto Villa habiéndolo incluido en aquella producción antológica que titularon “Dos dinastías” en el año 1988.
Pero así como se han conocido decisiones acertadas de los jurados en los concursos como sucedió con Marciado esa vez, también se han producido algunos veredictos que causaron desencanto en el público, los botones para mostrar son varios, pero nos referiremos a algunos de ellos por razones de espacio, por ejemplo, en 1971, fue inexplicablemente descalificada la canción titulada “Mi gran amigo” una elegía a ritmo de merengue que Camilo Namen hizo a su padre fallecido, con una letra sentida, una narración emotiva y una melodía agradable, sin embargo se declaró ganadora “Lamento Arhuaco” una canción de la autoría de Santander Duran Escalona, que no era mejor que la de Namen se dijo aquella vez por muchos analistas del tema, creo que el tiempo ha permitido aclarar las cosas, la canción ganadora tiene una letra muy local, y aunque tiene un buen mensaje es poco conocida y ha sido discreta su difusión, y la precitada elegía, con su mensaje más universal, ha permanecido en el gusto del público desde 1972 cuando Los Hermanos López con la voz de Jorge Oñate la incluyeron en el LP “El Jardincito”.
Igual tenemos presente que en 1976, no tuvo fortuna para alzarse con el premio “Abrazo Guajiro” una de las canciones de mejor letra que hizo Carlos Huertas, aquella en que dice “Buenos días festival, fiesta tradicional, folclórico concurso, te vengo a visitar, viejo Valledupar”, fue escogida como ganadora “Soy Vallenato” un buen merengue de Alonso Fernández Oñate con una mensaje coloquial y localista, de afirmación del orgullo de ser vallenato, la primera fue grabada por Jorge Oñate y Colacho, esta en el LP “Únicos” que salió en noviembre de 1976, y es de las recurrentes en la Radio, y la segunda fue llevada al estudio de grabación con mucha aceptación del público por la agrupación de Armando Moscote y Poncho López Gutiérrez.
En 1979 también hubo controversia, en aquella oportunidad obtuvo el titulo de Rey de la Canción Inédita Pedro García Diaz con la obra titulada “El poeta pintor” qu grabo su mismo autor en el mismo año con el Acordeón de Osmel Meriño, la incluyeron con poca fortuna en el LP “Grandes Valores”, fue un fallo considerado contraevidente, así fue relegada la gran obra de Fernando Meneses “Canasta de ensueños” grabada con éxito merecido por Jorge Oñate y Raúl “El Chiche” Martínez, esta en el LP “SIEMPORE UNIDOS” que salió en 1979, y tiene gran recordación entre los amantes de la música vallenata de verdad.
Lo que se considera como “La tapa de la cajeta” de los errores de jurados en festivales, sucedió en 1981, un cuerpo de jurados del cual hicieron parte Enrique Cabas, Fausto Cotes, Luciano Dangond, Alberto Herazo y Jaime Olivella “Declararon” desierto el primer lugar en el concurso de Canciones Inéditas, y colocaron en Segundo Lugar la que el público ya había declarado ganadora, “Nació Mi poesía” de Fernando Dangond Castro, aquello dejo perplejos a propios y extraños, fue entonces un insulto a la inteligencia; esa situación, y en un acto de constricción, el Consejo Directivo de la Fundación Festival de La Leyenda Vallenata, tuvo que dar la razón a la mas importante de las “IAS” la ciudadanía que nunca estuvo conforme con la decisión, por eso en otro acto inédito, profirió la Resolución 054 de 2000 por la cual se declaró con efectos retroactivos como canción ganadora del Concurso de la Canción Inédita “Nació mi poesía” constituida en clásico del vallenato tradicional con la magistral interpretación del Jilguero de América Jorge Oñate y el acordeón de Juancho Rois. Aquel fallo contraevidente, se pretendió justificar después del ojo afuera con el argumento que el Gobernador del Cesar en aquel momento era el padre del autor de la canción.
Todavía faltan datos de otros Municipios, porque en la versión XVI DEL FESTIVAL en 1983, la que el publico consideraba entonces como la mejor canción, “El corazón del Valle” de Roberto Calderón, tuvo que resignarse con un deshonroso Tercer lugar, porque contrario a lo que se decía entre los entendidos en la materia, el jurado dictaminó que la ganadora era “Yo soy el acordeón” de Julio Diaz, y si hoy preguntamos por ella muy pocos la recuerdan, mientras que la de Calderón se quedó en el corazón de Los Vallenatos y es recurrente en la programación musical de la Radio.
En 1998 también hubo controversia, los mas rigurosos analistas de las letras y las melodías que presenciaron la final del concurso de canciones inéditas durante la noche del 2 de mayo de aquella anualidad, no coincidieron ni con la decisión del jurado ni con el público que aplaudio entusiasta, no se sabe si fue la canción “Soy el folclor” o el bailaito jacarandoso de su autor, el viejito Luis Cujia, el se embolsillo al publico de entrada con su meniaito en la tarima, nada tuvo que hacer Beto Murgas con su obra magistral “Nativo del valle”, la primera la grabaron Joe Arroyo y Emilianito Zuleta, esta en el CD “El sol mayor” de Joe, y La segunda la impusieron como éxito Los Hermanos Zuleta, vino en “La trampa” y aún sigue sonando en “, ambas canciones vieron la luz en el mismo año del festival. ¡Se las dejo ahí!
Luis Eduardo Acosta Medina