La Guajira cumple 60 años de vida administrativa este 1 de julio. Pero lo que celebramos hoy no es solo un aniversario: es un nuevo comienzo. Porque por primera vez en décadas, esta tierra está dejando de ser la promesa incumplida del Caribe colombiano y empieza a ser el ejemplo posible de transformación real.
Durante años fuimos retratados solo desde el dolor: los niños wayuu muriendo por desnutrición, la sequía eterna, el abandono estatal, la corrupción sin rostro. Pero hoy, al cumplir seis décadas como departamento, La Guajira comienza a reescribir su historia desde la dignidad y el talento de su gente.
En estos 60 años, hemos comprendido que el verdadero desarrollo no vendrá de decretos lejanos ni de discursos vacíos. Vendrá de nosotros: de los jóvenes que crean empresas con propósito, de las mujeres que lideran comunidades, de las nuevas escuelas que florecen en las rancherías, de la apuesta por la energía solar, la educación, la cultura y el deporte como motores de transformación social.
La Guajira será una potencia energética, educativa y cultural. Y no es una frase de campaña. Es una convicción basada en hechos:
Hoy somos pioneros en la transición energética en Colombia, con proyectos solares que pueden iluminar el futuro de todo el país.
Nuestros jóvenes se preparan para liderar no solo en la región, sino en el mundo.
Y comunidades enteras han demostrado que cuando se les escucha y se les respeta, saben construir paz, sostenibilidad y progreso.
En este aniversario, no pedimos que nos vean con lástima. Pedimos que nos miren con respeto. Porque La Guajira no quiere asistencialismo: quiere autonomía, justicia y futuro.
Celebro estos 60 años no como un cierre de ciclo, sino como un punto de partida. Porque lo mejor de nuestra historia aún no se ha escrito.
Y será escrita por nosotros: los que creemos en esta tierra, los que no nos vamos, los que decidimos quedarnos a transformarla.
Feliz aniversario, Guajira querida. Que tu viento ahora sople a favor de la transformación real y que seas lo que siempre has estado destinada a ser.
Juana Cordero Moscote
Bendición Juana tu palabras sabias y coherente es la realidad a grito pedimos despegar este viaje al éxito por nuestros jóvenes y brille mi guajiras vella