No son estas unas elecciones normales, lo he dicho antes y lo repito ahora, en las cuales solo hay un cambio de gobierno. Acá están en peligro el sistema democrático y la economía de mercado. Petro, hay que decirlo, es un dinosaurio ideológico y está mucho más cerca de la izquierda carnívora del socialismo del siglo XXI que de la izquierda vegetariana. De hecho, sus propuestas en materia energética, de minería e hidrocarburos y de pensiones están más al extremo que las de Caracas, que se está moviendo al capitalismo y ha decidido sacar a bolsa compañías estatales como PDVSA, o Pekín, que anunció que impulsará las pensiones privadas.
Las recientes encuestas, sin embargo, traen confirmaciones y sorpresa. Una, el definitivo estancamiento de Petro en primera vuelta. Tocó techo. En la de Invamer está en 40,6%, en la de Guarumo en 37,9% y en la CNC está en 35,8%. Incluso en todas baja, menos en la de Guarumo donde su incremento es marginal. Dos, Fico también está frenado. Ahora solo crece marginalmente y registra 30,8% en Guarumo, 27,1% en Invamer y cae un par de puntos a 20,8% en la de CNC. Tres, definitivamente habrá segunda vuelta. No hay ninguna posibilidad de que Petro llegue al 50% más uno de los votos y tampoco ninguno de sus competidores. Cuatro, la caída definitiva de Fajardo. Baja del 6,5 al 5,1% (- 1,4) en Invamer (alcanzó a estar en 18,9 en noviembre), del 6,9 al 4,3% (-2,6) en Guarumo y y del 7,2 al 4% (-3,2) en la de CNC. Es perfectamente posible que no supere el umbral del 4% de votos que le da derecho a reposición de gastos. Más complicado, si no supera el umbral deberá devolver el monto total de la financiación estatal que haya recibido.
La sorpresa es Rodolfo Hernández. Hay quienes dicen que hay sesgos en la muestra de alguna encuesta y que buscarían favorecerlo. El conjunto de las encuestas no muestra tal cosa. Al contrario, son consistentes y prueban una tendencia innegable a favor del exalcalde de Bucaramanga. En Invamer salta del 13,9 al 20,9% (+7), en Guarumo del 12,4 al 20,3% (+7,9) y en CNC del 9,6 al 19,1% (+ 9,5).
Y en segunda vuelta ya le da pelea a Petro. En la de CNC están empatados con 40,5%; en la de Invamer la distancia es de 2,6 puntos (50 a 47,4), dentro del margen de error de la encuesta; y en Guarumo está a 3,7 (45,2 a 41,5). En segunda, Hernández empata técnicamente en todos los estratos con Petro, le saca 12 puntos entre quienes no tiene afiliación política y 7 entre quienes se identifican como de centro y ha ido cerrando la brecha entre los más jóvenes, la franja donde Petro es más fuerte.
Pareciera que, pasada la concentración de los medios y la opinión en la celebración y los resultados de las consultas interpartidistas, que impulsaron a Fico, el ingeniero encontró un aire sustantivo. Le ayudo, creo, que Petro no volvió a los debates y lo dejó solo en el discurso anticorrupción.
Y esa parece ser la clave de su ascenso. A ojos de sectores ciudadanos importantes, Hernández encarna el hastío frente a la corrupción y el hartazgo con los políticos tradicionales. Por un lado, si la campaña de Petro es una inmensa cloaca donde están todos los violentos, bandidos y tránsfugas con la peor fama, y Fico ha recibido el apoyo, abierto o tácito, de los partidos menos los verdes y los de izquierda, Rodolfo ha sido consistente en negarse a cualquier alianza. Por el otro, el santandereano ha estado temáticamente focalizado, hasta un punto que un experto diría que es absurdo pero que a él parece funcionarle. Solo habla de corrupción y nada más. No se le oyen y no parece tener ideas sobre salud, educación o infraestructura, por ejemplo, y de hecho ni siquiera tiene propuestas de fondo para implementar su discurso anticorrupción. Y nada le hace mella. La Fiscalía le imputó cargos por celebración indebida de contratos para favorecer a su hijo Luis Carlos en un contrato para implementar nuevas tecnologías para el manejo de basuras en el relleno sanitario de El Carrasco. Alguien dirá que difícilmente puede un funcionario público en Colombia salir sin investigaciones en su contra. Y es verdad. Pero acá el asunto es más serio porque ya hay acusación formal y el juicio iniciará el 21 de julio, quizás con Hernández como presidente electo.
Dicen que Petro ha impulsado a Hernández. De ser cierto, le salió el tiro por la culata. Si pasa a segunda, Rodolfo ganará por margen suficiente. Además de quienes lo apoyan ahora, contará con quienes están con Fico y con todos los antipetristas. Claro, la pregunta es si logrará superar a Gutiérrez. Tiene ventajas: la tendencia, el viento de cola, venir de atrás, haber conseguido la atención de los medios y de la opinión en el preciso momento en que se viene las elecciones, que de todos los candidatos es el menos conocimiento tiene la opinión y, por tanto, quien tiene más espacio para crecer. Pero son pocos días.
Como sea, si Fico no quiere llevarse una decepción mayúscula tendrá que hacer un enorme y original esfuerzo en televisión, radio y redes. Petro, que debe estar muerto de susto, estará rogando para que eso ocurra.
Mientras tanto, sería bueno que todos supiéramos quien es Marelen Castillo.
Rafael Nieto Loaiza