PELEARÁN CONTRA TI, PERO NO TE VENCERÁN; PORQUE YO ESTOY CONTIGO, DICE JEHOVÁ, PARA LIBRARTE.
Jeremías 1:19
Ser hijos de Dios no nos exime de las luchas diarias, pero si nos asegura salir victoriosos de ellas.
Una de las mayores batallas que enfrentamos como hijos e hijas de Dios es hacer lo correcto de la forma correcta y sobretodo en el tiempo correcto.
Para hacer esto debemos contar con dominio propio, con dominar esa área rebelde que todos tenemos y dirigirla al plan que Dios tiene para con nosotros.
No olvides que Dios te ha constituido como ciudad fortificada, como columna de hierro, y como muro de bronce.
¡Nada te hará frente porque Dios está contigo!
Oración: Amado Padre, ayúdame a confiar en tu perfecta voluntad. Que mi carácter sea como ciudad fortificada, como columna de hierro y como un muro de bronce. Se que nada, ni nadie podrá hacerme frente.
¡Hoy me declaro más que vencedor!
Álvaro Uribe Cerchiaro