San Juan del Cesar es un municipio que en el pasado la base de su economía dependía de la ganadería y la agricultura, hoy la vocación productiva se inclina por el turismo. El turismo viene lenta y gradualmente convirtiendo a este municipio en un atractivo destino que requiere gobernanza en el sector, invirtiendo importantes esfuerzos y recursos en el desarrollo de este renglón de la economía.
Este municipio encierra mucha historia por contar y darla a conocer, razón por la cual su narrativa es muy importante. Su riqueza cultural y musical lo convierten también en un territorio que debe intervenirse en todas las dimensiones de su desarrollo para posicionarlo a la vanguardia de otros destinos turísticos con menores potencialidades en la naturaleza y el ambiente. San Juan es un municipio hermoso, exótico, con una diversidad cultural y étnica de mucho renombre en el país, pero eso no es suficiente. Los sanjuaneros debemos de pensar en grande hasta convertir a San Juan en una agencia de desarrollo económico local donde exista un centro de pensamiento estratégico que trace su promisorio futuro con los actores locales del desarrollo.
Igualmente, en este propósito deben participar la institucionalidad local, la academia con el infotep y su centro de investigaciones, la sociedad civil y los gremios. Este pueblo requiere un alcalde comprometido con su responsabilidad misional del desarrollo como lo viene mostrando, pero también se requiere una participación ciudadana muy activa con su municipio, que no solo actúe con masa crítica de lo que se hace, sino como buenos contribuyentes y actores fundamentales del desarrollo local. Sentados en el umbral de la critica y con la línea abierta de la radio solo pidiéndole pan a la luna con mentalidad asistencialista no edificaremos el municipio que soñamos.
Todos, absolutamente todos los ciudadanos debemos comprometernos con el desarrollo social, económico y turístico de San Juan. Un municipio de sexta categoría, que depende de las transferencias nacionales en un 89% y solo recauda un 11%, es un municipio que requiere del concurso de todos sus habitantes para lograr su visión de desarrollo junto con la institucionalidad regional. San Juan tiene muchas ventajas comparativas para despegar competitivamente en el sector turístico, pero los empresarios indudablemente no pueden hacerlo solos, esto no es solo de sitios y balnearios encantadores para un turismo de aventuras y contemplación.
Se requiere la mano del estado en sus tres niveles, nacional, departamental y local, para avanzar y cerrar las brechas que nos separan considerablemente de la media nacional en desarrollo económico y Tics. Se requiere conectar nuestros territorios rurales mediante la red terciaria y el programa comunidades conectadas para ampliación de la cobertura móvil digital. Del mismo modo, se necesita la optimización de los sistemas de abastecimiento de agua y saneamiento básico y una mejor infraestructura de servicios públicos y urbanísticos.
Por todo esto, es fundamental el rol protagónico de la oficina de turismo departamental, el enlace local de turismo, el rol de FONTUR y el Ministerio de Comercio, para mantener a San Juan como uno de los 25 pueblos que enamora de Colombia en plena articulación y armonía con los empresarios y hoteleros turísticos del municipio. San Juan es cabeza del turismo en el sur por su oferta natural, pero se requiere crear su marca y hacerle marketing por las redes y medios de comunicación, pero con mayor compromiso institucional y apoyo y acompañamiento a los emprendedores locales.
La Estructura ecológica principal del municipio, con los ecosistemas naturales de La Sierra Nevada a su izquierda y la serranía del Perijá a su derecha, bañado por los valles hermosos del río Cesar y el Ranchería, describen la geografía de un territorio maravilloso para el turista y el inversionista. Así mismo, La Represa del Río Ranchería con un embalse de 198 millones de M3 de agua represada y La Reserva Forestal Protectora El Manantial de Cañaverales, complementan los atractivos turísticos del municipio. Sin dejar del lado, Los distritos de manejo integrado de Caracolí y la Serranía del Perijá, lo mismo que, el resguardo indígena Kogui – Malayo – Arhuaco y nuestra orgullosa cultura wiwa, que enaltecen la pertenencia étnica del territorio.
Pero todo no termina aquí, La infraestructura hotelera de San Juan con el Hotel Arisuan, Casa Murillo y Sarajet a la cabeza, junto con sus empresarios y propietarios son prenda de garantía para el turismo. Igualmente, La Ruta del Cacique y la ventana marroncita en La Junta con su hermoso museo en Carrizal, hablan por si solo de nuestra cultura musical.
Rafael Humberto Frías