Cumplir 40 años es como abrir una puerta que siempre estuvo ahí, pero que una no se atrevía del todo a tocar. Durante años miré esa puerta con una mezcla de temor, curiosidad y respeto. Pensé que el “cuarto piso” era un territorio donde solo llegaban las mujeres demasiado serias, demasiado maduras, demasiado listas para […]

