Enhorabuena un nuevo modelo político- económico de cooperación entre sindicatos, empleadores y el Estado está imperando en el norte de Europa. Noruega es el último país Nórdico en sumarse al nodo “izquierdista” al cual previamente se han matriculado Dinamarca, Finlandia, Islandia y Suecia. En esos lugares con predominio socialdemócrata desde hace más de veinte años se viene fortaleciendo la economía de mercado, paralelamente a la promoción de la educación como motor de la movilidad social y el reconocimiento de derechos igualitarios. A pesar de estos avances, los gobiernos liderados por agentes políticos de la derecha conservadora equivocaron sus planteamientos al promover la privatización de algunos servicios de bienestar social y la venta de la propiedad pública. Situación que rebosó la copa de los habitantes de estos países que reaccionaron en las urnas escogiendo el cambio del esquema político vigente.
Precisamente comentaba esta noticia hace unos días en una plática coloquial con un amigo, quien siempre se ha jactado de ser “voto de opinión” y me dice – ese es el modelo que necesitamos, lástima que en Colombia los políticos no saben leer a la gente. Los de derecha creen que están haciendo buen gobierno, sin embargo, actúan con arrogancia en la toma de decisiones, esa falla y desconexión con la gente le va a costar la próxima presidencia, se le están regalando la presidencia a la izquierda-, siguió el relato con una afirmación que me puso a pensar – Y por otra parte los izquierdistas de aquí no piensan ni actúan como los de allá, aquí son populistas! veo difícil su llegada al poder, no porque el pueblo rechace la idea de un cambio, sino por quienes se apropiaron del discurso. Es un problema más de protagonistas que de ideología por eso no van a llegar nunca- sentenció. Ese comentario me inquietó a investigar sobre las realidades en su contenido, a sabiendas que no es desconocido que muchos ciudadanos piensan como él. Pareció un Deja Vú, de veras que lo había escuchado antes.
En la tarea investigativa revisé notas de prensa, columnas de opinión y algunos ensayos críticos sobre el fenómeno político de la izquierda en el mundo. Tenía más de la mitad de la tarea realizada, en la documentación para escribir el artículo “Un laboratorio Político para Colombia” publicado hace poco dos semanas. Sin embargo, el perfil de la búsqueda era distinto, la idea era tratar de encontrar las razones por las cuales los partidos de izquierda no han logrado los mismos triunfos como en los países de la región.
Como el que busca encuentra, me tropecé elementos comunes que podría identificar personalmente como las causas del fracaso electoral de la izquierda en Colombia, siendo el primero y más importante la devoción por personajes y modelos políticos fracasados como la URSS, Cuba o Venezuela. Muchos colombianos no se explican por qué los militantes de la izquierda aún siguen venerando figuras emblemáticas de la crueldad o incompetencia de esos regímenes como prohombres dignos de alabanza y reconocimiento dignos de ser repetidos en nuestro país. Si le ponemos lógica, la gente no quiere encontrar una nueva forma de sufrimiento, si con las que tenemos nos basta y sobra.
Eso da cuenta no solo que los gobernantes están presuntamente están desconectados de las realidades, sino también los opositores. Los criollos de izquierda que hoy día han salido a la palestra pública caprichosamente no siguen el modelo Nórdico, sino que optan por el acotado Socialismo del siglo XXI promovido desde 2005 por Hugo Chávez. Apenas estas semanas se les ha escuchado hablar del modelo ganador en el norte de Europa, por el contrario, hasta la fecha se han esforzado por promover relaciones con Cuba, Rusia, China e Irán países donde las libertades escasean.
Por otro lado, es preciso reconocer la existencia de elementos negativos en el imaginario colectivo de habitantes de las regiones en las que hubo presencia de los grupos rebeldes afines a la izquierda. En esos lugares persisten los recuerdos de las nefastas acciones violentas, temas que se han trabajado entre las partes en los procesos de reincorporación y perdón frutos del proceso de paz; aun así, en el ambiente permanece la sensación de impunidad exigiéndose verdad, justicia y reparación. Por eso, en materia electoral, teóricamente no lograría mucho respaldo en esas jurisdicciones.
Ahora considerándolo desde el punto de vista empresarial, existe un gran temor en las industrias, gremios económicos y personas que tienen propiedades e inversiones. Se asume que la propuesta del sector de la izquierda en Colombia se fundamenta en el cambio del modelo económico, entendiendo que las bases teóricas del modelo se fundamentan en la intervención absoluta del estado como lo establecen los modelos socialistas o comunistas. Cualquiera de los dos que pretendan implementar promueve la desaparición de la propiedad privada, la dirección económica por parte del estado y la restricción de las libertades. Cabe resaltar que la mayoría de los regímenes izquierdistas de la región han fracasado precisamente en esta tarea, sumada a la alta tasa de corrupción generada y a la asunción de nuevas élites como los llamados “enchufados, boliburgués o bolichico” en Venezuela. Estos burócratas corruptos del partido de gobierno viven en opulencia mientras el pueblo en la miseria. Aunque experiencias socialistas exitosas en algunos países del norte de Europa, no son comparables con los desastres causados por estos lares.
La cereza del pastel está en las recientes actuaciones de los personajes más emblemáticos del sector quienes han protagonizado una guerra verbal en redes sociales, medios de comunicación y en algunos casos en los estrados judiciales. Estas actuaciones generan desconcierto en las personas que desean un cambio pero que con basados en esas discusiones no encuentran coherencia de las propuestas del sector en temas como promoción y rechazo a la anarquía; modelo económico, agenda ecológica y la propiedad. Las expresiones de intransigencia e insultos entre camaradas les afectan la percepción popular debilitando su imagen pública exponiéndose como incapaces para gobernar con idoneidad, competencia y especialmente para todos, aunque no hayan votado por ellos.
El sábado siguiente con estos antecedentes me fui a hablar con mi amigo a su casa, mientras le iba contando mis pesquisas notaba la altivez de su postura y la cara de felicidad porque los argumentos que yo esgrimía le daban supuestamente la razón. –Esto merece un Whisky! – Como es que se llama ese nuevo que Usted anda bebiendo ahora? Sin dejarme responder, siguió hablando – no me diga, yo la botella la conozco y la traigo, no me va a quedar grande buscarla. Mientras vengo hágase mentalmente un ejercicio práctico como si la izquierda ganara las elecciones presidenciales el próximo año, ¿trata de proyectar como sería la transición al nuevo régimen? Este man me dejó frio, sin embargo, ya estaba participando en el juego propuesto, por lo que debía llegar hasta el final como 456 (algunos sabrán otros no).
Realizando el ejercicio en gracia de discusión, inicié las cavilaciones basándome en que la conquista de la izquierda sobrevino por vía democrática, de una descarté las condiciones de autoritarismo que son propias del cambio de régimen como en los casos producto de una revolución o un golpe de estado. Con esa premisa, asumí claramente que lo primero en ocurrir debería ser la convocatoria a una asamblea nacional constituyente para cambiar la carta magna actual, en el nuevo texto se reemplazarán todas las instituciones existentes del estado, el aparato administrativo, la burocracia y otros elementos. Entre las decisiones más importantes, estaría definir el cambio del modelo económico y la reestructuración de las fuerzas militares, en esos dos se fundamenta la permanencia y respaldo del proyecto a largo plazo.
A los 15 minutos regresó el hombre con la botella de escocés, sonreído – ¡Hermano hay que mojar la palabra! – dijo, –en el camino me fui pensando respecto al futuro de la propiedad privada actual con ese combo. Ejemplo, por mi esfuerzo y sacrificio he comprado tres casas, en ese evento hipotético con base en la expropiación me obligarán a entregar dos al estado y quedarme con una. ¡Muy lindo, yo me he jodido un poco de años y me tocaría entregárselas a quien no ha hecho méritos! En esos regímenes no les interesa la calidad de la persona, su esfuerzo y sacrificio por salir adelante, para ellos todos debemos ser iguales, mandan cachaza. Yo también vengo de abajo y me parece injusto. No creo que vayan a tener respaldo con esa propuesta de hacer, borrón y cuenta nueva. Esto no es Finlandia, para hacer ese cambio se debe educar al pueblo, volverlo competitivo y eso se hace dentro de las aulas. Casualmente algunos de quienes hablan de imponer ese modelo no han dejado que los niños regresen al colegio. Esa es Colombia, ¡Tierra Querida!
Entre otras cosas, eso de que por allá en Europa lo que se está implementando no es izquierdismo, es pura paja recuerde Usted que esa teoría se le ha llamado desde finales del siglo pasado LA TERCERA VÍA, la cual se cimienta en fusionar la economía liberal con las políticas de bienestar social, en términos castizos Manjarrés, su intención es promover la justicia social en el marco de una economía capitalista. No te das cuenta que ese presidente que me decías en Noruega es un tipo millonario, aun así, plantea su propuesta en la reducción de la desigualdad, la discriminación de los grupos desfavorecidos y la pobreza, incluido el apoyo a servicios públicos universalmente accesibles como atención a personas mayores, cuidado infantil, educación, atención médica y mejoras laborales. Joda, eso es un paraíso. Pero a nosotros nos falta bastante pelo pa¨ esa moña, primero que se acabe la peleadera pendeja que tienen aquí.
Después de unos minutos le convencí que cambiáramos el tema de conversación porque bajo efectos del alcohol esas porfías se prestan para caldear ánimos. Aproveché el espacio que me permitió para revelarle que en adelante he decidido actuar para apoyar los procesos de reconciliación en la sociedad actual, algo que necesitamos urgente. Le dije que nuestro aporte inicial parte en no seguir favoreciendo los discursos antipáticos y reprochables de enemistades entre clases sociales, así como entre militantes entre izquierda y derecha; con el convencimiento que regionalizando la políticas públicas, implementando estrategias que hacen parte de las teorías económicas mixtas y la decisión de trabajar en equipo podemos resolver los problemas estructurales del país, que a la fecha siguen latentes y más distantes de lograr un punto de encuentro.
Cuando se acabó la botella me dijo, -nos vemos otro día, voy a descansar porque mañana temprano me pongo a calificar los exámenes de economía política de mis estudiantes de la Universidad. Bye-.
Adaulfo Manjarrés Mejía
Felicitaciones Adaulfo por este bien documentado articulo que nos pone a reflexionar en los dos modelos políticos en contienda…. toca escoger entre uno de los dos ……continuidad o cambio……no hay puntos intermedios…..escogeremos al que le veamos menos defectos y mas valores.