Recientemente recibí la amable invitación de mi estimado amigo Henitzo Martínez a ser parte del jurado del concurso de preparaciones culinarias de repostería y panadería en el marco del programa Anfitriones para la Paz de Conexión y FIDA.
Cinco grupos de creativos y entusiastas jóvenes participantes de ese programa trabajando en equipo, crearon exquisitos platillos los cuales llegaron a la mesa cuidadosa y estéticamente presentados. En su narrativa dieron cuenta de un conocimiento amplio de los productos locales que generosamente brotan cada tanto del bosque seco tropical guajiro, así como de las humeantes cocinas afro, indígena y criolla de los hermosos rincones de la variada geografía peninsular.
Productos agrícolas como el plátano, la ahuyama, el café y el maíz cariaco, entre otros, fueron cuidadosamente utilizados para llevar a nuestro exigente paladar de jurado calificador, una experiencia sublime. Los exquisitos sabores dulces de Monguí, de El Pájaro y de Dibulla, fueron combinados con las frutas que fácilmente se encuentran en las comunidades indígenas como la iguaraya, o en los patios urbanos y rurales en frondosos árboles como el mango, la jovita de lata y la papaya.
Betsy Sierra, joven empresaria del sector gastronómico, cocinera y entusiasta docentes de este programa, sería la encargada de liderar los encuentros de formación junto con otros profesionales de diversas áreas para que, entre conocimiento técnico y habilidades para la vida, cada participante contara con conocimientos valiosos que le permitieran afrontar nuevos retos desde sus proyectos de vida alrededor de las cocinas y las mesas en el departamento, y por qué no, en el mundo.
Lo que pude observar y probar, fue el resultado de un alto sentido de compromiso con su participación en este programa. Una actitud abierta y dispuesta al aprendizaje, motivada además por un fuerte sentido de pertenencia por las tradiciones culinarias locales, y un impulso creativo e innovador evidente, sensible a la identidad y la cultura locales que se evidencia en la gastronomía de esta tierra que tanta admiración genera entre visitantes y locales y que está llamada a seguirse posicionando a nivel nacional e internacional, generando oportunidades y desarrollo socioeconómico para todos.
Felicitaciones a los ganadores de ese concurso, y a cada uno de los participantes del programa. Felicitaciones también a quienes lideran este tipo de proyectos y procesos que generan capacidades especialmente en las nuevas generaciones que están llamadas a liderar desde todos los escenarios posibles, la pronta y colectiva transformación positiva del departamento de La Guajira.
María Isabel Cabarcas