Cuando José Ramiro me dijo: Madre este fin de semana tenemos Edición Premium, ¿vas a Participar? Respondí que sí, no obstante, le reclamé: ¿Por qué no dijiste antes? Me preguntaba si el tema que tenía era el apropiado para celebrar el tercer aniversario de Ojo Pelao Magazine. Creo que mi opinión sobre la agenda mundial en contra de la identidad humana, es muy denso. Así que decidí escribir un detrás de cámaras de mis dos años, 3 meses y 5 días de estar acompañando el proceso de Ojo Pelao’ Magazine que ya llega a sus 3 años de edad y yo, a mi crónica # 90 publicada en OPM (Ojo Pelao’ Magazine, en adelante). ¡Feliz coincidenciaaaa!!
Con tanto por celebrar, he invitado, (Yoyita, la Comunicadora – Periodista), a la columnista y Cronista Noralma Peralta (Yo, La Escritora), a que charlemos de las cosas que suceden escribiendo Crónicas para OPM. (Créanme que intenté hacerlo de otros modos y no me fluyó. ¡Aquí vamos!! Yoyita, entrevistando a Yo. Jajajajajaja)
He leído todas tus columnas y en su gran mayoría son crónicas. ¿Por qué crónicas, siempre crónicas? Pregunta Yoyita, levantando la ceja derecha, esponjando la nariz y torciendo la boca, como indicando una incomodidad.
Mientras Yo, la miraba con ojos de: ¡Quien te oyere! Suspiré y le dije:
“Bueno supongo que me pasa a mí, lo mismo que a Escalona, a Leandro, a Santa, o a mi primo Rafa; que se les hace más fácil contar el testimonio, que escribir un poema y cantarlo; porque crecimos en el campo y en el campo se contaban cuentos, no se leían poemas o novelas; entre otras cosas, porque la mayoría eran analfabetas, así que obligados, mantenían la tradición oral; y como uno aprende más del ejemplo, que de lo que lee o le enseñan, me acostumbré a echá el cuento; y sí, escribo poemas y sí escribo novelas, pero, me encanta contá el cuento, en forma cronológica, con pelos y señales, me imagino que hay gente oyéndome y todo. Por eso escribo hasta las risas. Dije Yo. Jajajajajaja.
¡Esto me está gustando! Jajajajajaja Yoyita, conversando con Yo.
A propósito de risas, ¿cuál ha sido tu crónica más divertida? Interrogó Yoyita.
¡Ándale! La más divertida puede ser subjetivo, porque puede que lo haya sido para mí y para el lector no…. Pero que yo me haya divertido mucho haciéndola… dejáme pensá … se me ocurren varias … las que escribo sobre costumbres de La Peña me hacen reír mucho, las mentiras de mi tío Baute también, por el humor fino que tenemos… Pero creo que me divertí, disfruté y me gocé mucho con, Cuando Era Narca y No Lo Sabia
https://ojopelaomagazine.co/cuando-fui-narca-y-no-lo-sabia/
Desde su concepción en una conversación con algunos miembros de la iglesia que pastoreo, en la que nos moríamos de la risa, porque yo les decía que todo lo que nos pasa a los que amamos a Dios, nos ocurre para bien y según el propósito para el que hemos sido llamados; que por eso yo había vivido las experiencias de mi vida, para cuando llegara alguien en esas circunstancias, no lo juzgara y no tuviera que ponerme en su lugar, porque ya había estado; por ejemplo si a la iglesia llega un narco, ya yo lo puedo entender, porque yo fui narco y todos soltaron la risa pensando que era una broma. Para sorpresa mía, se reían más y más, cuando les contaba mis aventuras rurales con la marihuana, y al final, me dijo Dailyn: “Pero es una historia chévere, deberías escribir una crónica de eso”. Luego, afinando detalles y completando recuerdos con los peñeros en el grupo de WhatsApp, fue otra jornada de diversión, todos contando sus experiencias trayendo recuerdos con más de 30 años de edad; y bueno, ¿qué te digo? al escribir me reía de mis locuras al procesar el tema. Cuando la publiqué tuve muchos comentarios y llamadas y mensajes en el WhatsApp, felicitándome y gente identificándose con lo escrito. Recuerdo que Rita Fernández me llamó muerta de risa a comentar la crónica, calificándola de genial, pero preocupada que la policía fuera por mi papá. Luego la propuse en El Premio Anual De Periodismo PG (Periodistas de La Guajira) y ganó, así que otra vez me dio satisfacción. Diría que esa ha sido la que he disfrutado más. Terminé de decir.
¿Y la más triste? Quiso saber Yoyita.
Yo, suspiré, apoyé el codo izquierdo en la pierna, sosteniendo el mentón y la boca con la mano izquierda, miré hacia arriba, tratando de elegir… No es fácil porque las más tristes se las he escrito a mi mamá. De hecho, yo tomé la decisión de escribir la novela de mi familia con la muerte de mi mamá, como una forma de hacer catarsis; otros lloran, gritan, viajan, pelean con el mundo; yo escribo y lloro. Soy más llorona que Silvestre. La primera que escribí no sé si refleja la profunda tristeza por la que pasábamos en el mundo, con tantos amigos perdidos en la pandemia. Pero quizá, porque aún estoy viviendo ese dolor profundo, esa tristeza enorme de ver a mi hermano padeciendo esa horrible enfermedad, que me hace tener lo peor de la vida y ver lo mejor de Dios en él, que oírlo me llena de fe, elegiría esa: Mi Hermano Armando: Un General De La Fe. Duele tanto y tanto… dije suspirando hondo y dejando salir tristeza liquida de los ojos…
https://ojopelaomagazine.co/mi-hermano-armando-un-general-de-la-fe/
Han sido cuatro meses viviendo el proceso más fuerte, nos ha enseñado y sensibilizado más que cualquier otro… “Hemos sido probadas en el fuego, Yoyita”. Dije Yo. “Como el oro en el crisol” respondió Yoyita. Nos abrazamos y dijimos al unísono: “Estamos viviendo!”. Y vivir implica aflicción… Jesús lo dijo: “En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido el mundo”. “Sigamos que para “tristiar* lo que hay es tiempo, pero José Ramiro ahorita empieza… ese no da tregua. Dije.
Sigamos dijo Yoyita preguntando: ¿Y tu mejor desborde literario? Esa que tú dices Uy, ¡me la fumé verde!!
JAJAJAJA y tú, que sabes de fumar verde? Pregunté.
Aja, ¡yo oigo decir la expresión y ajá! Bueno aquí la que pregunta soy yo, tu responde. Dijo Yoyita, riéndose de sus propias locuras.
¡Jajajajajaja!! ¡No vas a cambiar nunca! Le dije.
No. Me respondió. Para que cambiar lo que a Dios le costó tanto, para que le quedara perfecto.
¡Jajajajajaja! ¡Ay Dios! Veamos… mi mejor creación literariamente hablando… Yo diria que Mi Novela, me gusta mucho la idea, que mi mamá, habiendo sido tan controladora en vida, organice su sepelio desde su ataúd. De hecho, es un fragmento de Mi Novela (que no sé cuándo voy a terminar). Diría que por eso tiene ese toque de “realismo mágico” tan propio de nuestro entorno real. Supera el contexto de la crónica periodística, para trascender al terreno literario. A mí me gusta mucho.
Y en terreno periodístico, ¿cuál escoges?
¡Erdaaaaaaa No sé! Me gustaría revisar, a ver. Pero si reviso ya no vale, debe ser una que yo diga: ¡Esto quedó hermoso! Dejáme pensá… No sé. Quizá mi primer Beso… no sé si es la mejor escrita, pero yo cuando la escribí sentí que se me escapó del alma. Al terminar de escribir fue como si hubiese pagado una deuda, me sentí libre… esa sensación de rendirle un homenaje cargado de gratitud, al amor… no sé, aunque lloré con coraje escribiéndola, me sentí muy feliz, liberada, completa: al terminar. Uuuuffffff
https://ojopelaomagazine.co/mi-primer-beso/
¡Wow! Sí, a mí también me encantó, es de mis favoritas, junto a Cosas de Mariposa, Mi Novela Dos y … ¡toitas! Soy tu fan number one jajajajaja.
¡Mas te vale!! Jajajajajaja
¿Y tu mejor entrevista?
¡Uuuuuyyyyy!!! Las he disfrutado tanto que no puedo elegir… Una a la que le tenía mucha hambre era a la Jacinto Leonardi Vega, soñaba escribir Soy La Novia del Poeta. La de mi manito Marciano fue tan conmovedora, lloramos, bailamos, cantamos. Lo agarré golpeado y casi muerto por el amor de su vida, una vez más… culpándose, latigándose y sin embrago con la esperanza viva. Yo conozco esa esperanza que se resiste a morir y estuve tentada a irme a San Andrés a hacer entrar en razón a Helena, para que este amor no quedara contrariado. Al entrevistar a Helena me rompió las alas a mí también… todavía me da sentimiento. La de Adrián Pablo, la que le hice en La Peña, una mañanita de Julio, a pies descalzos, un concierto de violina y canciones hermosas, exclusivo para mí. ¡Inolvidable!! La de Rita Fernández Padilla. ¡Que locura!! Me la llevé pa’ La Peña… Con mi esposo, mi papá, mis hermanas alcahuetas (Ocha y Vicky) La complicidad de Adrián Pablo para hacer una fogata y ver el amanecer en La Peña, cantar con Rita y Adrián acompañados en la Guitarra del Gran Leo Bermúdez, Sombras Perdidas… ¡y ese momento en que cantamos con Rita canciones de un cd que acababa de lanzar, nunca antes escuchadas por mí y me salía la letra como si las hubiese escuchado toda la vida! fue un momento diseñado por Dios, sublime, divino. La de Rosendo, tan especial, su atención tan bonita, cantar con él, Copitos de Pino. Las que le hago a mi papa cada vez que nos sentamos a hablar de nuestra historia familiar, me las disfruto, me llenan, me ubican. Y las que voy a hacer hoy aquí en La Hacienda La Escalona, Por Lebrija Santander, a mi amigo Néstor León y sus amigos hermanos del alma: Álvaro y César. (no hare spoiler). Que decir de la de mañana al gran poeta, muy, muy admirado por esta mujer que intenta escribir: Fernando Meneses, con quien he soñado hace años cantar Mi Mejor Canción y Quise Manchar tu Alma. ¡No puedo esperar! Preguntáme la que me ha dolido no hacer…
¿Cual?
Me duele el alma, creí que coronaria mi sueño más preciado, abrazar a Nicolás José Maestre Martínez, vine feliz mis 10 horas en bus en busca de ese sueño dorado, y a pesar que ya habíamos cuadrado que nos veríamos hoy, me ganaron unos estudiantes que se lo llevaron a más de 4 horas de Bucaramanga a disfrutar unos días de buen clima y oxígeno puro. En su “vejentud”, como me dijo cuándo lo llamé hace un rato a preguntarle a qué hora nos veíamos; Nicolás está un poco delicado de salud, y ya bastante avanzado de edad, por eso me duele el alma que no lo haya podido abrazar y agradecer por escribir por mí, la canción que hice mía para mis padres: Las Cosas Mías. Haremos la entrevista por video llamada, pero… y el abrazo y los besos, a quien se los entrego. Le pertenecen.
Quien sabe que haga Dios de aquí a que nos vayamos…
Siiiii lo quiero abrazar, y besar y cantar con él: “Aves que cruzan los cielos de ese pueblo hermoso, de la lejanía. Arreboles que en la tarde invitan al alma, cantarle al amor. Brisas de noches marinas que roban aromas a la novia mía. Nubecita silenciosa que besas la tierra y te entregas al sol. Tráiganme noticias, de las cosas bellas que dejé allá en mi región, Una Madre Buena, un amor sincero y Un Padre Trabajador… esa sería mi mejor entrevista…
Noralma Peralta Mendoza
Excelente como todas tus crónicas, que atrapan desde la primera linea que empieza una a leer, es como si estuviera ahi mismo ,en el momento que cuentas todo. Felicitaciones.
Creo que se quedó mocho el papel Seño!
Al leer esta hermosa crónica queda uno es picao! Faltó más espacio para que la reina de la pluma diluyera más de lo que sabe, «atrapar al lector con su sabiduría y su majestuoso estilo para escribir» no me cansaré de darle las gracias a Dios por haber puesto a una persona tan maravillosa en mi camino, felicitaciones mi Seño, Dios me le regale salud y más sabiduría 🤗🤗🤗🤗🤭
Imaginaba a Yoyita mientras leía y quería ser ella para decirte que si logras ver a Nicolas lo abraces de mi parte también que así como le pertenecen nuestra gratitud abrazos y besos a nosotros nos pertenece «Las cosas mías » creo que no la ha cantado ni bailado ni la ha llorado más que nosotros que nos la escriture
Excelentes las crónicas de Noralma!!! Siempre nos quedan en el alma!!! Que sean muchas más!!! Felices 90!!!