Invitados por la Revista Semana y Foros Semana: «Compromiso Guajira», donde Cerrejón informó a los diferentes medios y representantes de las comunidades de las zonas de influencia sobre el informe de sostenibilidad Cerrejón 2023 y la premiación de la XXI versión del premio de periodismo Cerrejón, como columnista de Diario del Norte, asistimos al hotel Waya, en Albania, el jueves 30 de mayo, dentro de los temas que han sido relevantes como iniciativas ambientales en las distintas modalidades, lo que ha hecho a Cerrejón merecedor de los mayores reconocimientos del orden nacional e internacional.
Claudia Bejarano, como presidente de Cerrejón, siempre ha estado acorde a la misión y visión de El Cerrejón en la explotación minera, como ha sido el cuidado a lo largo de treinta y nueve años protegiendo el medio ambiente de manera eficiente y responsable en el área explotada, protegiendo siempre el entorno de las comunidades donde se lleva a cabo la explotación, cargue y descargue y exportación del carbón a todo el departamento de La Guajira. Bejarano, en el último foro Semana, llevado a cabo en el hotel Waya, hizo una exposición gerencial en los diferentes temas y lo que ha venido representando El Cerrejón para La Guajira y para Colombia. En los diferentes escenarios, Samuel Lanao Robles, como director general de la Corporación Autónoma Regional de La Guajira, “Corpoguajira”, del seguimiento a la parte ambiental y también como apoyo a la minería responsable que ejerce El Cerrejón, siempre ha mantenido un respaldo de la autoridad ambiental en lo público a la multinacional, en lo privado.
Opiniones como la de la exministra del medio ambiente y reconocida ambientalista, la barranquillera Cecilia Rodríguez González – Rubio; en las que recuerdo que expresaba sus reflexiones hacia la gran minería, y que para una parte del País se ha convertido en una “esquizofrenia pública, hacia el tema ambiental” donde una gran porción de la gran prensa nacional, así como sindicatos de todo el País, quieren culpar del deterioro del medio ambiente a las multinacionales de la gran minería, y fue más allá, donde las explotaciones mineras que se realizan en sitios deprimidos por la alarmante pobreza y subdesarrollo imperante, expresan que la empresa privada o las multinacionales reemplacen al Estado en su responsabilidad social, cuando es ese Estado, el que debe asumir esa responsabilidad, pero en la mayoría de los casos, son los dirigentes, llámese gobernadores o alcaldes donde se realiza la explotación de la gran minería, los que actúan de manera irresponsable y no le han dado buen uso a los recursos de regalías que origina la explotación minera, adicionalmente los recursos que les gira el Estado de manera trimestral por el Sistema General de Participación, que provienen de los ingresos que el mismo Estado recibe por el impuesto de la renta y del IVA para la inversión en acueductos y saneamiento básicos y no lo realizan como está estipulado, sino que lo desvían hacia otros fines, tal como lo sucedido en diferentes regiones del País, que recibiendo millonarios recursos o regalías, todavía no disponen de un óptimo acueducto para sus habitantes y si por allá llueve, por acá no escampa; el otro ejemplo fue lo sucedido en Barrancas, en el año 2003, con respecto al mismo tema y estos hallazgos continúan siendo recurrentes en diferentes municipios, como por ejemplo, Uribía. El papel que ha venido ejerciendo El Cerrejón, como minería responsable en el cuidado y conservación del medio ambiente ha sido de manera eficiente y responsable; los resultados están ahí.
Es una verdad de a puño, El Cerrejón sí ha venido aplicando las normas ambientales, tanto nacionales, como internacionales, en la protección del medio ambiente en la explotación minera de carbón a cielo abierto más grande de Latinoamérica. En todo lo que ha venido realizando, como en la protección del polvo del material estéril, en la puesta en marcha y colocar nuevamente con capa vegetal a los botaderos de los millones de metros cúbicos de ese material donde se extrae el carbón, también es digno de reconocer, así como reverdecer el área de la vía del ferrocarril, de la creatividad de sus empleados en la colocación de paneles solares a lo largo y ancho de la vía férrea, así como la debida protección del aceite usado, la protección de los nacederos de agua, en bien de las comunidades aledañas y hasta la protección de la fauna y flora y de los desechos en las áreas residenciales de la mina, de material de desperdicio y convertirlo en abono orgánico, es digno de admirar y merece el reconocimiento de la opinión publica guajira y de sus dirigentes.
De ahí todos los resultados en días tan especiales para la minería responsable y digno de destacar, también, que villanueveros, como Obel Ramírez y Robert Ramírez, del área de producción, que han sido resaltados con la distinción ambientalista de la multinacional minera, así como muchos funcionarios guajiros. Hoy, Robert Ramírez, con ese sentido de pertenencia que lo caracteriza, alza su voz de protesta en contra de tantos bloqueos a la vía férrea, que han sido del 80 %, ajenos a la actividad minera y que viene afectando las exportaciones de carbón y por ende afecta los ingresos de regalías para La Guajira. ¿Quién está detrás de estos bloqueos?
Una reflexión final: ¿Por qué las iniciativas ambientales que han sido exitosas en El Cerrejón, no equipararlas y trasladarlas a los diferentes municipios guajiros a través de una acción tripartita entre Corpoguajira, el departamento y los municipios, que de seguro, con el apoyo de la multinacional, poner en práctica para proteger el medio ambiente guajiro?
Hernán Baquero Bracho