FRACASO DE LOS JUEGOS PANAMERICANO EN BARRANQUILLA

Como una bomba o gotas frías, cayó la divulgación de la noticia el día 9 de enero, relacionada con la cancelación de los Juegos Panamericano, en el distrito de Barranquilla, “Puerta de Oro de Colombia” programados para el año 2027, por la autoridad deportiva, Panam Shorts, como causa general, por incumplimientos de requisitos y clausulas, precontractuales suscritas, condicionadas a cumplimientos, sancionables relacionado con exigencias en términos o plazos, establecidos, para validar, la efectividad de los  eventos deportivos.

Panam Sports, responde la negativa, la misiva sobre reactivación de celebrar los juegos Panamericano, en la metrópoli de Barranquilla, al presidente Gustavo Petro, e igual forma: a las instituciones, entidades y distinguidos; personajes de la opinión pública, que se solidarizaron en favor de Barranquilla, a efecto de reivindicar el derecho asignado a la arenosa. El presidente Gustavo Petro, el ministro de Hacienda y la ministra de Educación, son los “blanco” imputados, como los responsables del fracaso, por no pagar una obligación morosa, como si esa hubiese sido la única causa.

El exministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, presupuestó con destinación al ministerio del Deporte, la suma de $33 mil millones, cuyo monto solo alcanzaría, para cubrir  el pago de dos cuotas morosas que suman ocho millones de dólares, pero  se necesitaba cumplir con otras exigencia, que comenzaron a incumplirse,  sin planes de soportes económicos, que amparara la sede de los juegos, que también origina causales, para cancelación de evento deportivos, haciendo efectivo la póliza de garantía, para cubrimiento de sanciones  por incumplimientos, más daños y perjuicios que se hayan generado.

Causales de incumplimientos, que también generaba la cancelación de los Juegos Panamericano, son los siguiente:  La no crearon el Comité Organizador responsable como entidad legal, a partir de la asignación de la sede. No pago la primera cuota de 4 millones de dólares, que debió cancelarlo el 30 de julio de año 2022. No presentó los diseños y cronograma, de trabajo, obras y logística; promocional de los juegos. Tenía que constituir póliza de garantías de seguridad y cumplimiento en el funcionamiento de los juegos, por un valor de UD$50 millones de dólares y por último, el acontecimiento que rebozó la tasa, fue el pago incumplido de las dos cuotas de 4 millones de dólares cada una. La última tenía programado el pago, para el día 23 de julio de 2023, pero no se hizo efectivo.

Panam Sports responde al presidente Gustavo Petro, poniendo de conocimiento, las faltas, en que incurrió Colombia, con el contrato suscrito el 31 de mayo 2021, establecido para desarrollar los juegos Panamericano, en el distrito de Barranquilla.

 Los incumplimiento iniciaron desde el gobierno de Iván Duques, complementados en el  gobierno de Gustavo Petro, por falta de comunicación en transición de gobierno y trámites administrativos, no obstante, la autoridad deportiva, enviará al gobierno, llamados de  atención, recordándole el cumplimiento y los efectos negativos, originados de una de las clausula, pero las dos misivas recordatorias remitidas una en el primer semestre del año 2022 y 13 de septiembre del mismo año, no tuvieron respuestas del gobierno.

Los juegos pudieron haber sido cancelado desde mucho antes, de los primeros días del mes de enero, del presente año, cuando se incumplió el pago de la segunda cuota, sumando una deuda de ocho millones de dólares, el año inmediatamente anterior, sin embargo, la entidad deportiva Panam Sports, albergaba que Colombia, cubriera la obligación, antes que finiquitara la vigencia del año 2023. El pago de los ocho millones de dólares, se hubiesen perdido, por incumplimientos de otras causales, tales como, constitución del Comité Responsable de los Juegos, que requiere, la aprobación de una ley, que hasta la fecha no se había radicado el proyecto, ni en el pasado, ni el presente periodo legislativo. ¿Quiénes conformarían el comité?  Lo determinaría la ley. Subsiguiente manual de reglamentación y nombramiento, del gerente operativo-administrativo de los juegos.

No han presentado inventarios de los establecimientos y canchas deportiva, disponibles, conforme a especificaciones requeridas, dentro del perímetro de la metrópoli con formada además de Barranquilla, Soledad, Galapa, Malambo y Puerto Colombia; para la competencia de 20 modalidades deportiva, entre las cuales mencionamos Atletismo, Futbol, Baloncesto, Voleibol, Hockey, béisbol, Natación, Rugby, Gimnasia, Taekwondo etc. En los citados juegos, participarían, unas 30 naciones o estados, de América Latina e islas del Caribe

Relacionar números de canchas por modalidades y especificaciones, en diseños y presupuesto, para ejecución de obras deportivas y urbanísticas, que deban construirse, mediante un organigrama prestablecido, controlado por la autoridad deportiva. El problema es que la inversión de los Juego Panamericanos en Barranquilla, no se insertó e incorporó, recursos económicos, en el Plan Nacional de Desarrollo, del gobierno Gustavo Petro. Los costos de obras podrían oscilar en 300 millones de dólares, que no se encuentran incluidos en el presupuesto nacional.

La oposición indignada se vino rastra en ristre, a culpar del fracaso de los Juegos Panamericano, al presidente Gustavo Petro, porque no habían pagado antes que terminara el año, las cuotas morosas que se le adeudaban a Panam Sports, cuando trataba de una de las tantas causales incumplidas.

A la ministra del Deporte, miembros del Congreso de la República, radicaron una Moción de Censura, para tramitarla en la próxima legislatura que inicia en el mes de marzo, con la finalidad de sancionarla, con la destitución del cargo. Es mejor detallar el informe de Panam Sports, para que se den cuenta, que la ministra y el presidente Petro, no son los únicos responsables del fracaso, antes que utilizar a la ministra, como “Chivo expiatorio” aferrándose en atribuir la culpabilidad, para justificar responsabilidad con castigo y a la vez, ofender al presidente, de manera temeraria.

De conservarle el cupo de la sede de los juegos a Colombia, tendría que proponerse otra ciudad, diferente de Barranquilla, de conformidad a los reglamentos de la autoridad deportiva, para comenzar de cero, pagando los ocho millones de dólares, que se adeudan, improvisando, planificación y diseños, de obras y canchas deportivas.

 

Martín Barros Choles

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